A pocos días de haber terminado su participación en Succession, Sarah Snook anunció que protagonizará una adaptación de El retrato de Dorian Gray, que se pondrá en escena el próximo año y en el Theatre Royal Haymarket de Londres.
En rigor, la actriz australiana de 35 años encabezará la aclamada adaptación de ese unipersonal por parte de la Sydney Theatre Company.
Este es un auténtico desafío profesional para Sarah Snook, quien por su trabajo en la celebrada serie de HBO ganó un Globo de Oro y un Critics Choice Award. En esa producción se puso en la piel de Shiv Roy, una de las aspirantes al trono empresarial de Logan Roy (Brian Cox), su padre en la ficción.
El retrato de Dorian Gray ha sido un gran éxito en Australia desde su estreno en 2020, protagonizada por el actor Eryn Jean Norvill.
La producción disfrutó de tres temporadas con entradas agotadas en Sydney y realizó una gira por Melbourne, Adelaide y Auckland.
La obra permite que un solo actor interprete a 26 personajes diferentes mediante el uso de cámaras de video intrincadamente coreografiadas.
Snook no es ajena a los escenarios londinenses, ya que en 2016 apareció junto a Ralph Fiennes en The Master Builder de Matthew Warchus.
Sarah Snook y su cero contacto con cierto nivel de riqueza
Antes del inicio de la última temporada de Succession, Sarah Snook le ofreció una entrevista a Télam, en la que advirtió que “no todos estarán satisfechos” con el final de la ficción creada por Jesse Armstrong.
Además, en ese intercambio Snook rememoró que al principio no lograba empatizar con la cínica y manipuladora Shiv, y que fue “el personaje más difícil” que le tocó encarnar.
“Creo que me sentía demasiado diferente a ella de manera que pudiera hacer un buen trabajo, para interpretarla honestamente. No tengo experiencia personal con este tipo de riqueza o interactuando con ella en absoluto. Y entonces sentí que tal vez era un salto demasiado lejos”, reveló.
“Como actor tenés que amar a tu personaje. Tenés que respetar quién es y lo que hace, y tenés que ser su defensor, su mayor admirador, la persona que lucha por él y sus opiniones. A medida que ella evolucionaba supongo que he cambiado con ella en términos de mi apoyo, pero creo que mi opinión sobre ella se ha mantenido similar: no es alguien de quien sería amiga en el mundo real”, bromeó.
Para la actriz, el éxito de la serie y la expectativa de la audiencia sobre los capítulos finales tenía mucho que ver “con dónde estamos en este momento como sociedad y cuánto miramos aspiracionalmente hacia la riqueza”.
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