At The Door y Daisies son canciones de dos discos muy importantes del rock & pop norteamericano de 2020. Pertenecen a los nuevos discos de The Strokes (The New Abnormal, ya publicado) y de Katy Perry (KP5, previsto para agosto), respectivamente, y están conectadas por algo más que el período de lanzamiento.
El nexo entre ambas composiciones no está en la producción musical ni en un enfoque expresivo determinado. Está en la decisión de que sus recientes videoclips sean de carácter animado y que sean dirigidos artísticamente por el diseñador cordobés Pablo Gostanian, miembro fundador del estudio 2veinte, con sede en Buenos Aires y con una cartera de clientes multinacional que destaca a Adidas, a Nike, a Sony, a Fox, a Disney, a Nickelodeon y a GoNoodle, entre otras marcas pesadas.
Gostanian, durante una conferencia internacional. (Gentileza 2veinte)
“Este estudio altamente premiado es reconocido internacionalmente por sus proyectos de diseño y animación. Su trabajo continuo para sus clientes en todo el mundo los ha visto emplear varias técnicas y estilos, desde animación pura en celdas 2D hasta CG completo y todo lo demás”, presenta la página oficial del emprendimiento que Gostanian comparte con Agustín Valcarenghi.
"El estilo de 2veinte ejemplifica la vanguardia de la nueva generación, con colores llamativos y con una inclinación por lo surrealista", escribió el periodista Andy Polaine, de la revista especializada Computer Arts UK, como para dar cuenta del impacto de Gostanian y los suyos.
Wild & Woolly from 2veinte on Vimeo.
"El estudio también es conocido por sus iniciativas no comerciales –completa el sitio–. 2veinte ha creado más de 10 proyectos experimentales hasta ahora. Por ejemplo, los cortometrajes como The Ricochet Splendid, 100 años de Genocidio Armenio y Wild & Woolly han sido seleccionados y exhibidos en más de 50 festivales de cine y animación en todo el mundo".
Claro, los clips de At The Door y de Daisies tienden a engordar este último punto de la carta de presentación oficial.
Ahora bien, ¿cómo se dio la primera aproximación de 2veinte al entretenimiento musical norteamericano?
"Veníamos del palo comercial y más independiente hasta que nos contactó Mike Burakoff, quien escribió y dirigió el clip de At The Door, de The Strokes, que salió hace unos meses. Él llegó a nosotros por un amigo en común (Benjy Brooke, el productor), porque, como venía del palo más live action, necesitaba especialistas del mundo de la animación", revela Gostanian en contacto con VOS.
"Nos llegó el e-mail y aceptamos inmediatamente", completa el diseñador, quien vivió en Córdoba hasta los 19, edad en la que alcanzó a cursar un año en la Facultad de Arquitectura de la UNC.
La carrera de Diseño, en tanto, la realizó en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde también fue pasando de estudio en estudio durante 12 años. Y así fue hasta que fundó el propio con Valcarenghi.
Gostanian junto a su socio Agustín Valcarenghi. (Gentileza 2veinte)
"Una vez que accedimos a hacer el video, tuvimos una reunión en Los Ángeles con Albert Hammond Jr. (uno de los guitarristas de The Strokes), en la que tiramos ideas y vimos storyboards. Hubo un idea y vuelta copado, convergieron visiones previas con otras nuevas que pudimos aportar… Y eso logró que el guion fuera más sólido", continúa Gostanian sobre un trabajo desarrollado en condiciones normales. Es decir, en el pasado inmediato a este presente pandémico.
Daisies, de la popstar Perry, se lanzó un tiempo después, con el coronavirus afectando los pulmones y las agendas de todo el mundo. En un tiempo histórico en que el home office aún es amo y señor.
–¿Trabajaron con autonomía, en este caso?
–Sí, porque el trabajo nos vino con el storyboard prácticamente hecho, a diferencia de lo que pasó con The Strokes. Pero la de Katy Perry fue una producción acotada de tres semanas… Nunca habíamos trabajado en ese tiempo. Concretamente, terminamos de diseñar las escenas y animamos el video entero, que dura dos minutos y 50 segundos. Trabajamos con independencia… Sobre todo, porque ellos estaban jugados en el tiempo y no tuvieron más que confiar en nuestra capacidad. No tenían vuelta atrás. El clip tenía que salir en una fecha, así que a todo lo que le presentábamos decían "está bien". La libertad fue absoluta dentro del brief, del storyboard que había que respetar.
–¿Qué podés decir acerca del desarrollo de un trabajo así en cuarentena?
–Fue una experiencia nueva porque estamos muy acostumbrados a trabajar dentro de nuestro estudio. Alrededor de 35 personas estuvieron involucradas… Sólo en Argentina, este clip demandó el trabajo de 35 personas, que fue coordinado por dos productoras de afuera. No estábamos acostumbrados al home office, por lo que todo representó un auténtico desafío. Fue la primera vez que dirigí un proyecto de esa magnitud y desde mi casa. Los días pasaron, todo nos sentó mejor y logramos aceitar el proceso. Finalmente lo pudimos hacer. Hay que convivir con este modo de trabajo. No es lo que quiero, pero es lo que hay.
