En los últimos meses, proyectos como Dum Chica, Buenos Vampiros, Las Tussi, Winona Riders, Revistas o El Club Audiovisual han comenzado a copar las carteleras locales de shows.
El sello cordobés Nagasaki Records, con el apoyo de entidades cercana como GRL PWR, Surfer Rosas y Casa del Puente Discos, es responsable de buena parte de esas visitas que dan cuenta de una nueva camada de artistas vinculados al rock, al punk y a otros derivados afines.
Y en este caso, ese mismo compendio de agentes es también el promotor de la segunda visita de los porteños Mujer Cebra en apenas cinco meses. Este viernes, el trío de rock alternativo volverá a actuar en Córdoba, esta vez en Casa Babylon y junto a Sakatumba y Vitter. Será desde las 20 y con entradas desde $ 1.500 (más cargo por servicio) a través de Alpogo.com.
Mujer Cebra, en plena expansión
El proyecto formado por Santiago Rocca (guitarra y voz), Patricio García Seminara (batería) y Gonzalo Muhape (bajo) vive un presente de notable crecimiento y en los últimos meses ha paseado su propuesta por diferentes provincias argentinas. Además, en septiembre llegarán por primera vez a Chile.
En paralelo, el grupo acaba de presentar dos nuevos adelantos del que será su segundo disco. Después del homónimo Mujer cebra, editado a finales de 2021, la banda comenzó a mostrar el que será su sucesor a partir de mayo, cuando lanzó Y no me digan nada. A finales de julio, apenas una semana atrás, se sumaron Nuevos miedos y Nadie va a decidir por vos, estrenadas en formato de doble single y con videoclip filmado como sesión en vivo, al hueso.
“Nuestro primer disco también tuvo un single doble, queríamos aprovechar para mostrar dos caras distintas en un mismo lanzamiento. Entendemos que no es lo más estratégico a nivel comercial pero era un poco seguir la misma lógica, y terminamos usando para videoclip una sesión grabada en vivo”, explica el guitarrista sobre esta decisión ajena a los tiempos pero también más que significativa si se tiene en cuenta la identidad musical del grupo.
En ese sentido, Rocca anticipa un segundo disco que ya se huele cercano, pero que no ha modificado las prioridades del trío.
“Tratamos de apaciguar un poco nuestras expectativas para poder concentrarnos más en cómo y que queremos transmitir en el disco. Pero sin dudas fue distinto a la grabación del primer disco, sobretodo en la manera en la que fue grabado”, comenta el también cantante. “Volver al estudio fue un placer. Es la parte que más disfrutamos además de tocar en vivo. Veníamos con un ritmo de shows bastante agitado y tuvimos poco tiempo para preproducir todo”, señala.
A su vez, Rocca no vacila a la hora de responder si Mujer Cebra se siente parte de una nueva escena asociada al formato banda y a un sonido más crudo y eléctrico que el que se puede encontrar en otros circuitos.
“Sentimos que hay mucha movida en cada lugar al que vamos, siempre encontramos alguna banda increíble”, apunta el músico. “Nagasaki en este caso fue clave para linkear con Córdoba y conocer a los Rosa Profunda, quedamos flasheados con ellos”, ejemplifica.
“Tomamos algunos elementos de música con la que crecimos y nos conmueve. Creo que en esta escena pasa mucho eso, es muy heterogénea”, resume el guitarrista y cantante de Mujer Cebra. Y elabora un diagnóstico sobre ese nicho que se percibe cada vez más efervescente: “Compartimos escenarios con muchas bandas muy increíbles, que combinan distintos géneros. Tal vez no tenemos tanto que ver entre sí, pero en esa mezcla se genera algo muy interesante”.
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