En las últimas horas, el de Santiago “Chano” Moreno Charpentier es un nombre que se repite en diferentes puntos del dial, en portales, en canales televisivos y en cualquier otro segmento informativo vinculado con la actualidad en la República Argentina.
En medio de un supuesto brote psicótico, en su casa del partido bonaerense de Exaltación de la Cruz, el músico fue baleado en el estómago por un policía que intentaba reducirlo. Fue internado de urgencia en el porteño Sanatorio Otamendi, donde fue operado y le extirparon parte del páncreas, el bazo y el riñón izquierdo. También le saturaron una perforación del colon.
Lamentablemente, se trató de un nuevo episodio en el que las acciones de Moreno Charpentier cobraron notoriedad por fuera de su labor creativa, ya sea al frente de Tan Biónica, la banda que lo consagró como referente popular, o en su sinuoso camino como solista.
De hecho, basta repasar el listado de episodios protagonizados por el cantante para dar cuenta de una situación que se viene sucediendo desde hace años. Una problemática derivada del consumo y el exceso de sustancias que, incluso, apuntaló la separación de Tan Biónica en medio de su momento de mayor éxito.
Trayectoria
El próximo 23 de septiembre, Chano cumplirá 40 años. A los 20, y junto a su hermano Bambi y sus amigos Sebastián Seoane y Diego Lichtenstein, creó Tan Biónica. Sin embargo, no fue inmediato el suceso de un grupo que construyó su sonido con un pie en el rock y otro en el pop, pero siempre buscando sintonizar el clima y el sentir de una época.
Luego de un demo, un EP y un primer disco publicado en 2007 (Canciones del huracán), en 2010 llegó Obsesionario, que de la mano de canciones como Ella, Beautiful y Obsesionario en la mayor convirtió a Tan Biónica en una presencia cada vez más habitual en las radios masivas.
Después de varios años de shows en escenarios pequeños de distintos puntos del país y de mucho “remo”, el grupo dio un salto cualitativo –definió un sonido propio– y cuantitativo que lo llevó a las puertas de la masividad.
A partir de ese momento, Tan Biónica definió su perfil como nuevo referente de la canción pop y sintetizó referencias del rock de estadios, la música electrónica y la cultura del entretenimiento a inicios de la década de 2010.
“Yo escuchaba de todo, desde los Cadillacs hasta Depeche Mode, pasando por los Smiths y Morrissey. Esa diversidad está plasmada en Tan Biónica. Podíamos comprar un disco de Roxette y también uno de AC/DC”, le dijo el propio Chano al diario rosarino La Capital en 2013, dando cuenta de esa amplitud estilística que le permitió al cuarteto convertirse en una auténtica máquina de hits, de la mano de los hermanos Moreno Charpentier como principales compositores.
A mediados de 2012, la banda coronó la gira de presentación de Obsesionario con tres Luna Park y se preparó para ganar todavía más impulso con Destinología, el disco que los convirtió en la banda más importante de aquel momento a nivel nacional.
La canción que abre ese álbum es Ciudad mágica, que se convertiría en uno de los mayores símbolos musicales de la banda (tanto para sus fanáticos como para sus detractores) y también acompañaría la campaña presidencial de Mauricio Macri en 2015.
Pero eso no fue todo. Destinología, producido por los bersuiteros Pepe Céspedes y Oscar Righi, no sólo continuó, sino que profundizó la seguidilla de éxitos radiales del grupo, más allá de ese primer corte. La melodía de Dios, y más tarde Música y Mis noches de enero, impulsaron el suceso transversal de la banda que a mediados de 2013 inició la gira de presentación de ese álbum con un doblete en el Quality Espacio, de la ciudad de Córdoba.
Para entender la magnitud del crecimiento de Chano y los suyos, ese mismo tour concluiría en diciembre de 2014 con un show frente a cien mil personas en el Hipódromo de Palermo.
En paralelo, ese también sería el comienzo de la última etapa del grupo. Con su cantante convertido en una superestrella, Tan Biónica siguió cosechando su éxito a nivel latinoamericano y a fines de 2014 lanzó dos nuevos cortes, entre ellos Hola mi vida, quizás su último gran hit.
El cuarto disco de la banda, Hola mundo, fue lanzado en simultáneo en todo el continente a mediados de 2015, pero más allá de su impulso comercial inicial –Tan Biónica seguía siendo el grupo más importante de Argentina– la música de la banda comenzó a quedar en segundo plano.
Excesos mediatizados
Ya en la segunda mitad de 2015, y cuando Tan Biónica tenía otros cuatro Luna Park agotados en el horizonte próximo –fueron 11 en total en la carrera del grupo–, Chano protagonizó el primero de sus episodios mediáticos extramusicales.
Luego de un primer accidente en Jujuy poco tiempo antes, el 5 de agosto el artista embistió a seis autos estacionados tras meterse en contramano en una calle del barrio porteño de Belgrano. Tras chocar finalmente contra un garaje, el músico recibió una golpiza por parte de los vecinos de la cuadra, dueños de algunos de los vehículos afectados, y tuvo que ser hospitalizado.
En marzo de 2016, en tanto, volvió a tener un accidente de tránsito, esta vez al chocar contra el acoplado de un camión en la ruta 3, a la altura de la localidad bonaerense de Virrey del Pino.
Tras algunos días de incertidumbre, Tan Biónica comunicó en abril que el grupo se tomaba un impasse por tiempo indeterminado. En 2017, además, el frontman volvería a protagonizar otro accidente vehicular, aunque esta vez se trató de una mala maniobra a la hora de estacionar.
Desde entonces, Chano se refugió en su carrera solista, en la que presentó dos discos más (El otro, de 2018, y El doble, de 2019). El primero de ellos incluyó el que fue su último gran chispazo de masividad, Carnavalintro (lanzado como single en 2016), que confirmó el gen popular de la música del Moreno Charpentier y sus dotes como compositor desprejuiciado.
En diciembre de 2018, una denuncia por parte de Militta Bora, su pareja durante algunos meses en 2016, volvió a poner al cantante en el centro de la polémica. La artista acusó formalmente a Moreno Charpentier por abuso sexual y por violencia física y psicológica. El músico fue sobreseído, pero en febrero último la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional anuló el fallo y ordenó reabrir la investigación.
Ya en 2019, Chano decidió internarse en un centro adventista de la provincia de Entre Ríos. A finales de ese mismo año, y habiéndose presentado en televisión varias veces para contar sus problemas con las drogas, aseguraba a La Nación: “Estoy en un momento en el que decidí dejar todas las cosas que me hacían mal, como la adicción a las drogas. Dejé todo, pero es una lucha de todos los días. No es que uno corta y se acaban los problemas. Es muy importante dejar de frecuentar a las personas tóxicas”.
A comienzos de 2021, y luego de un año trunco a raíz de la pandemia, Chano presentó su último tema a la fecha, Mecha, que fue publicado en mayo como primer corte de difusión de su tercer disco solista, con fecha de salida estipulada para fines de 2021.
En una reciente entrevista había asegurado sentirse “muy bien” y reflexionaba: “Este regreso de poder estar sonando en la radio me flashea. Me siento muy agradecido”. Algunos días después, el cantante pelea por su vida, que se parece cada vez más a una montaña rusa.
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