"En mi tercer década no me como ningún chamuyo", canta Emanero en la primera parte de Como vos lo hacés, su primer track desde el lanzamiento de su último álbum a la fecha, Tres millones de años luz, de 2018.
Efectivamente, la frase resume bastante del camino recorrido por Federico Andrés Giannoni desde sus comienzos en la escena vinculada al hip hop nacional, más de quince años atrás. Hoy, Emanero cuenta 33 abriles y es un joven pero experimentado referente dentro del arte de hacer canciones con rimas y mucho flow.
La actual cuarentena lo encuentra produciendo material para su quinto disco, que saldrá a través del sello multinacional Warner Music, y experimentando día a día con su lugar en el mundo, el estudio de grabación.
“Soy del 40% privilegiado de la población que puede comer, que está tranquilo, que tiene trabajo y puede vivir cómodo así que mejor no podría estar”, admite el músico y productor. “Estoy aprovechando para componer, para preparar el disco. Era un año pensado para eso. Antes de la cuarentena ya me lo estaba tomando por ese lado de quedarme en el estudio lo más posible, así que en ese sentido casi que ayudó”, explica.
-¿Tuviste otra perspectiva a la hora de componer nuevo material teniendo más tiempo y menos compromisos?
-El estudio es mi hábitat natural, el lugar en el que paso más tiempo. Le doy mucha bola y no me quiero sentir encerrado, sino todo lo contrario. La diferencia más grande la noté con la tranquilidad del día a día, se calmó un poco todo, se bajaron muchos cambios. Uno puede trabajar un poco más tranquilo, con menos llamados, menos trabajos atrasados o cosas para entregar. En ese sentido me pude relajar un poco más, sobre todo los primeros dos meses de la cuarentena. Ahora ya no, pero al principio sentí mucho esa tranquilidad y esa falta de presiones que fue muy funcional a la creatividad.
-Siempre buscaste expandir tus horizontes. ¿Qué podés adelantar del disco?
-Siempre la experimentación en mi música fue muy bienvenida. Siempre traté de animarme a experimentar cosas nuevas y ponerlas en mis temas sin miedo. No porque un disco haya tenido un sonido y un éxito en particular, voy a seguir yendo por ese lado. La idea es rescatar lo mejor y hacerlo evolucionar. El disco nuevo tiene mucho que ver con Como vos lo hacés, desde el lado de la electrónica y los sintetizadores. Y también hay otros sonidos dando vuelta que son muy interesantes, más relacionados con el rock, o con reminiscencias al punk rock. Son canciones de rap en las que pruebo sonidos que están en mí desde hace muchos años, influencias, cosas que escuché desde adolescente. Siempre había tenido ganas de sacarlos afuera y ponerlos en mi música, y de a poco fui encontrando la manera. Hay mucho electrónico, mucho rock, y en cuanto a letras mucha introspección, cosas con más perfil social. Hay un poco de todo, pero Como vos lo hacés tiene mucho de todas las canciones que van a venir, tiene un poco de cada una, por eso también lo elegí como el primer tema para lanzar. Resumía muy bien todo lo que estoy preparando.
Otras pieles
Con varios años de carrera y habiendo vivido en primera persona el crecimiento del hip hop –y la posterior explosión del trap- en Argentina, Emanero es uno de los nombres más respetados del nicho vinculado a la escena urbana. Al mismo tiempo, es considerado un compositor y un productor asentado, y ha sido invitado a colaborar con artistas tan lejanos como Los Pericos, Los Tipitos o Satélite 23, proyecto paralelo de Ale Sergi.
-Sos compositor, intérprete, productor. ¿En qué lugar te sentís más cómodo?
-Me siento un hacedor de canciones, que es lo que más me gusta. Me han ofrecido producir música de fondo para alguna serie y nunca me enganché mucho con ese tipo de cosas. A mí me gusta hacer canciones pensadas para moverle algo a la gente. Y si trabajo como productor me gusta meterme en la canción, de sacar lo mejor de eso. Las canciones con las que más cómodo me siento son las que hago para mí. Incluso cuando soy productor también estoy tratando de dejar mi impronta, y de trabajar con gente con la que tengo compatibilidad. Si no tengo nada para aportar, no tiene sentido meterme en un proyecto.
-Aprovechaste para publicar versiones en Instagram a piano y voz que tuvieron mucho repercusión. ¿Cómo se dio eso?
-Fue súper divertido, no sabía que iba a tener la repercusión que tuvo. Me he encontrado con comentarios que jamás me hubiese esperado, de colegas y de artistas que admiro. Fue una etapa muy linda. Yo sabía que no todas las canciones eran para esto. Elegí las que consideraba que iban a quedar mejor y las fui haciendo de a poquito, una por semana. Fue un experimento muy lindo, es algo que yo ya hacía por mi cuenta, pero nunca lo había pensado como un contenido para Instagram TV. Creo que también iba mucho con el momento que estábamos pasando, quizás había predisposición a escuchar algo más relajado. Supongo que en algún momento, cuando junte nuevo material, voy a volver a subir otra serie.
