En la reciente edición del Cosquín Rock, que tuvo entradas agotadas por primera vez en 23 ediciones, volvió a medir su impacto económico, social y ambiental pero esta vez a través de un estudio de triple impacto, desarrollado por el área de Investigación y Extensión del Instituto Cultura Contemporánea.
De acuerdo al estudio, en su edición 23 el festival movilizó recursos económicos por cerca de 9.112 millones de pesos (contra los $1.415 millones de 2022) representados en inversión de organización y compras de productos y servicios de los asistentes, así como la economía derivada en materia de traslados, estadías y gastronomía.
El evento generó 5.600 empleos directos, a los que sumándole los empleos indirectos dentro del festival, y los emprendedores e independientes y comercios de la región, arrojan una estimación general supera las 10.000 personas con actividad.
En familia, en auto y “a vivir la experiencia”
Cosquín Rock acentúa su perfil familiar y multigeneracional, con un 24,4 % de asistentes que llegó con sus padres o hijos.
De los asistentes, el grupo mayoritario (del 37%) dijo ser universitario, junto a quienes dijeron estar cursando ese nivel (67%). El 50% trabaja y el 20% sólo estudia (27%, ambas cosas).
Poco más de 50% asistió por primera vez a Cosquín Rock 2023 y casi 80% de los casos compró abono de dos días, lo que impacta fuerte en el turismo.
La conformación del público arroja que el 60% llega desde afuera de Córdoba: el 30% llega desde Buenos Aires, Santa Fe araña el 15% mientras que la Capital de Córdoba aporta poco más del 20%.
Unas 28 mil personas vacacionaron en esta fecha y zona para aprovechar el festival y, del total del impacto económico, cerca de 3000 millones integran el sector turístico, unas de las industrias con mayor derrame social y menos costo medioambiental.
Casi el 70% de los asistentes fue al festival por la experiencia en sí, más allá de la grilla y algún artista en particular.
Poco más del 70% pernoctó una o más noches para asistir. El 40% lo hizo por 3 noches y un 35% aprovechó para vacacionar y quedarse más tiempo. Casas y cabañas alojaron al 40%.
En cuanto al medio de transporte elegido para llegar, el auto particular lideró con el 70%, seguido por el ómnibus trajo casi al 30%. y en avión 4,4% (algo así como 26 Boing 727).
Gestión de residuos
Según el informe, la gestión de residuos fue de 70m3 de reciclables por día (se estiman 80m3 pos festival), 300lt de orgánicos por día (900lt en total pos festival).
Un porcentaje cerca del 40% de los residuos fue recuperado, “dato destacable ya que en eventos de esta magnitud, el porcentaje no suele superar entre el 5% y el 10%”.
Este índice fue posible gracias a los 70 voluntarios de Ecosquin, el área de sustentabilidad del festival. Además, se conformaron 2 camas de compostaje a la vista para tratar el material orgánico del sector gastronómico destinadas a generar abono y evitar el enterramiento innecesario.
Cómo se realizó el informe
El informe fue creado metodológicamente junto a la Magister Mariana González, y puesto en marcha por el equipo de profesionales de la institución, junto a veinte colaboradores rentados de las distintas formaciones del establecimiento. Además, contó con el apoyo del Ministerio de Cultura de La Nación y fue conducido por Luca Miani y curado por Rodrigo Rojas.
En cuanto a la influencia ambiental, se midieron distintas variables como la huella de carbono, disturbio a la fauna, vegetación, contaminación sonora y residuos dispersos.
Para eso se relevaron datos dentro del predio, en zonas aledañas y en puntos alejados (al menos 2 km). Para detectar el cambio, se relevó antes del armado del festival y durante el festival. Los niveles preliminares ya indican como aceptable el impacto (los valores finales se conocerán en las próximas semanas).
