En las últimas horas, se volvió viral en la red social Twitter, un video subido desde la cuenta del periodista deportivo Gonzalo Santo Tomás, donde cuenta una particular y dolorosa historia que le tocó vivir nada menos que con su pequeña hija “Cata”. Por fortuna, esos años oscuros quedaron atrás, y existe un final feliz.
“Después de 5 años de llorar, sufrir y empezar a valorar la vida! Podemos decir que mi hija #Cata le ganó al cáncer!! Alta definitiva!!!!”, publicó el trabajador de medios de comunicación con profunda emoción. Lo hizo acompañando un video del momento en el cual toda la familia se reunió para festejar con Cata.
En la escena se puede ver un ritual conmovedor que realizan todos los pacientes que logran superar el cáncer, tocando una campanita.
El posteo tiene casi 100 mil Me Gusta y supera los 4.200 retuits hasta este jueves al mediodía. Respecto de los comentarios, son todos positivos respecto de lo que pasó Cata y la familia de Gonzalo.
“Maravilloso!!! Gracias a todos quienes fueron parte de su tratamiento, sepan que cada mínima acción y buena energía logra tanto bien para quienes enferman y necesitan de sus saberes y acciones. Desde el científico investigador, el médico renombrado, el señor que abre la puerta”, dice uno de los primeros comentarios del posteo.
“No los conozco, pero les deseo lo mejor en especial a esa hermosa nena que ahora esta empezando una nueva etapa de su vida, la de disfrutar la vida misma!!”, dice otro de los usuarios de nombre Ema.
“Como me alegro, a disfrutar todos los días, mi marido perdió la batalla la semana pasada, mucha salud y que nunca vuelva esta enfermedad cruel en la vida”, remarcó una mujer que perdió a su pareja por el cáncer.
Por qué tocan la campana aquellos que son dados de alta de cáncer
Tocar tres veces la campana es el mejor sonido para expresar la alegría y la felicidad de un paciente al superar un cáncer.
En se marco, muchas fundaciones han instalado estas campanas en los servicios de oncología de muchos hospitales para celebrar el fin del tratamiento oncológico de estos pacientes y, a su vez, transmitir esperanza y apoyo a todas las personas que siguen luchando contra esta enfermedad.
Una gran iniciativa que ya está presente en los centros hospitalarios de muchos otros países del mundo.
Estas campanas reducen la ansiedad que conlleva el tratamiento y es una nueva forma de compartir la felicidad de quien ha finalizado el tratamiento y a su vez, transmitir esperanza al resto de pacientes.
Cada campanada supone poner un punto y final a una etapa ya superada y dar comienzo a una nueva, llena de alegría que, además, aumenta la unión entre pacientes, acompañantes y personal sanitario
