En el barrio de Guararapes, en la ciudad brasileña de Fortaleza, un adolescente de 14 años evitó una tragedia al ayudar a su primo, de 13, que se atragantó con un chocolate. El hecho quedó registrado como un claro ejemplo de la importancia de conocer técnicas de primeros auxilios.
El joven, identificado como Silas Cabreira, reaccionó de inmediato y aplicó la maniobra de Heimlich. “Ubicó las manos agarradas y presionó en el diafragma para arriba, así poder sacar el objeto atorado en la garganta”, describieron medios locales.
Esta técnica consiste en rodear a la persona por la espalda, colocar un puño cerrado cuatro dedos por encima del ombligo, cubrirlo con la otra mano y ejercer compresiones rápidas hacia atrás y hacia arriba. El objetivo es generar la presión suficiente para expulsar el elemento que bloquea las vías respiratorias.
El episodio, que rápidamente se difundió en redes sociales, despertó mensajes de admiración por la reacción del adolescente y volvió a poner en agenda la necesidad de difundir este tipo de conocimientos básicos, que pueden marcar la diferencia en una situación de emergencia.