Lo que debía ser un festejo de cumpleaños en Cayo Costa, Florida, terminó de manera inesperada para Shawn Meuse. El hombre fue mordido en la pierna por un tiburón limón en el momento en que intentaba tomarse una foto con el animal antes de devolverlo al mar.
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Según relató a Gulf Coast News, sostenía al ejemplar de casi dos metros cuando ocurrió el ataque: “No se sabe qué va a hacer un animal salvaje, ¿sabes? Y eso ocurre, estamos en su territorio durante este tiempo”.
De inmediato, el Departamento de Bomberos de Boca Grande aplicó un torniquete para detener la hemorragia y coordinó el traslado aéreo al Centro Médico Gulf Coast, donde Meuse fue sometido a una cirugía. El audio de la llamada al 911 confirmó que permanecía consciente en todo momento.
El propio Meuse reconoció que la mordida podría haber tenido consecuencias más graves: “Una pequeña diferencia en la mordida habría cambiado drásticamente mi situación”. Aun así, aseguró que planeaba volver a la pesca de grandes depredadores marinos.
El caso reavivó el debate sobre la normativa en Florida, donde el tiburón limón es una especie protegida que debe permanecer en el agua durante la pesca. Además, se exige un curso gratuito para quienes practican esta actividad desde la costa, algo que Meuse admitió no haber realizado.
Rob Howell, naturalista que analizó las imágenes, sostuvo que la reacción del tiburón se debió al miedo y al dolor: “Tenía dolor y estaba asustado, y no mucha gente les da a estos animales el respeto que merecen, y yo no vi ningún respeto en ese video”.
La Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida (FWC) abrió una investigación para determinar si se violaron las regulaciones sobre el manejo de especies protegidas.
