Layla Russell, una joven británica de 19 años, vivió una escena insólita y angustiante luego de estacionar su Fiat 500 frente a la casa de una amiga en Colchester, Inglaterra. Minutos después de haber entrado a la vivienda, el auto desapareció.
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Creyó que se lo habían robado, pero la realidad fue mucho más extraña (y peligrosa): se había olvidado de poner el freno de mano.
Según se pudo ver en una cámara de seguridad, el auto comenzó a deslizarse lentamente hasta cruzar la calle y terminar en una zanja de más de dos metros de profundidad.
“Media hora después salimos y el auto no estaba. Pensamos que alguien lo había robado”, relató su amiga Lilly Tilyard, también de 19 años, al medio británico What’s The Jam.
La joven contó que en ningún momento escucharon ruidos extraños. “No habíamos escuchado nada raro, así que revisamos la cámara de seguridad para ver quién se lo había llevado. Pero cuando me di vuelta, lo vi en los arbustos. Estaba medio metido en un lago”, agregó sorprendida.
Layla entró en pánico al darse cuenta de lo ocurrido. “Era su primer auto y lo había tenido solo por un año”, explicó Lilly. Afortunadamente, su papá llegó rápido al lugar y logró sacar el vehículo con ayuda, sin daños importantes.
“La única pérdida fue pagar un lavado porque quedó lleno de barro”, comentó entre risas su amiga, que compartió el video del accidente en TikTok. La publicación superó los 4 millones de vistas y despertó todo tipo de reacciones, desde carcajadas hasta advertencias sobre seguridad al estacionar.
“Pensamos que era un robo, pero fue un susto que no vamos a olvidar”, cerró Lilly.
