Hace exactamente una semana, Laboulaye se movilizaba para encontrar a Joaquín, un adolescente de 14 años que no había ingresado al Ipem N° 278 “Malvinas Argentinas”, donde estudiaba. Ese jueves 29 de junio, después de las 16, Mariela Flores y Martín Sperani, los padres del chico, radicaron una denuncia de búsqueda de paradero en la Unidad Departamental Presidente Roque Sáenz Peña, en el sudeste de la provincia de Córdoba.
Lo que nadie imaginaba era el desenlace horroroso que decantaría días después: el domingo 2 de julio, pasado el mediodía, el chico fue hallado sin vida en una casa abandonada a la vuelta de la escuela.
Por el crimen, está sospechado un amigo, también de 14 años. Hoy, L. –se resguarda la identidad por ser menor de edad– está demorado en el Complejo Esperanza, por disposición del juez Sebastián Moro, de competencia múltiple, que atiende la causa de la muerte de Joaquín.
Cómo fue el reinicio de clases en el colegio de Laboulaye
Después de tres días sin actividad académica, este jueves se retomaron las actividades escolares en el Ipem N° 278 con jornada reducida.
“El lunes cerramos por duelo. Martes y miércoles hubo exámenes y hoy la jornada es reducida con todo el alumnado, en ambos turnos, hasta las 16 de la tarde”, describió una alta fuente de la gestión educativa a La Voz.
En relación con las actividades que se llevan adelante, expresó que se trabaja en la “escucha atenta con los estudiantes y otras jornadas de reflexión”.
Joaquín y L. eran amigos y cursaban el tercer año en esa institución. La víctima había ingresado desde primer año a ese colegio, no así L. que había comenzado este año en el Ipem N° 278.
La fuente educativa aclaró que, en ese curso, durante el turno de la tarde no se presentó ningún pedido especial. “Hubo mucha concurrencia de alumnos. Estuvieron contenidos”, sostuvo.
Desde que el crimen de Joaquín sacudió a Laboulaye y a todo el país, equipos del Ministerio de Educación de Córdoba viajaron a la ciudad para contener y trabajar con toda la planta educativa de esa institución escolar.
“Entre todos intentamos superar el dolor de lo ocurrido. Nos estamos poniendo del lado de los estudiantes para hacer una escucha activa”, precisó. Y prosiguió: “En estos días se abordaron temas generales, se plantearon estrategias pedagógicas referidas al tema de convivencia y escuela entre los estudiantes”.
El viernes será el último día de clases del cuatrimestre y luego el colegio entrará en receso por las vacaciones de invierno.
“Estamos movilizados y articulando acciones conjuntas con los profesores para ver cómo proseguir una vez cumplimentada la etapa de vacaciones de invierno”, cerró la fuente consultada por este medio.
Cómo sigue la causa judicial que investiga el crimen de Joaquín
Hoy la investigación sigue bajo secreto de sumario. El juez Moro y su equipo trabajan bajo un hermetismo absoluto. Sobre el móvil del homicidio, los investigadores continúan encolumnados tras una sola hipótesis central, donde el único responsable es el adolescente detenido en el centro de menores Complejo Esperanza.
Dicen tener indicios que hacen pensar en una motivación ligada a celos, producto del vínculo amistoso que unió por algún tiempo a Joaquín con su presunto victimario y que se creía roto hacia el final de los hechos. Esa desunión habría derivado en un ataque feroz e inesperado hacia Joaquín.
El juez Moro recibió en las últimas horas las conclusiones finales de la autopsia realizada en Río Cuarto al cuerpo del chico. No obstante, inhabilitó a los profesionales del Cuerpo Médico Forense de Río Cuarto que participaron de ese peritaje para hacer declaraciones a los medios.
Pasado el mediodía de este jueves desde el área de prensa de la Justicia de Córdoba no se habían notificado oficialmente movimientos en la causa, según consultó La Voz.
El miércoles por la noche Mariela Flores encabezó una movilización para exigir justicia por el crimen de su hijo.
Este jueves hubo una nueva marcha durante la siesta. En las puertas del colegio la mujer manifestó que “no la van a callar” y que “tocaron al hijo de la persona equivocada”. Flores espera tener una respuesta urgente.
“No niego la hipótesis del juzgado, pero me lo tienen que demostrar con hechos. En mi cabeza hay otras opciones. Si alguien vio o sabe algo comuníquense con mi abogado, el letrado Raúl Frencia”, precisó ante los medios que se acercaron a la puerta del Ipem N° 278.
