Un pedido de captura de parte de la Fiscalía de Delitos Complejos de San Francisco movió a efectivos de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) que rápidamente dieron con un violador que intentaba escapar del país.
Fue en mayo de este año, que el hombre de 66 años –se resguarda la identidad para proteger la integridad de la víctima- terminó siendo detenido en la localidad de Junín, provincia de Buenos Aires, donde se escondía. Allí, esperaba el momento para cruzar la frontera.
La acusación que pesaba sobre él era grave: haber violado a su nieta de 6 años en reiteradas ocasiones, entre los años 2022 y 2023.
La víctima vivía junto a dos hermanos, su mamá y su abuelo en la misma vivienda, un contexto que implicaba que muchas veces la niña se quede en la casa sola con quien se aprovechaba de ella.
Según pudo saber La Voz, la madre de la víctima una vez llegó a la casa y se encontró con una extraña situación: su hija saliendo de una habitación y el hombre dentro en ropa interior. Aparentemente allí se percató que algo raro sucedía. Pidió asesoramiento judicial y luego denunció.
La pequeña, en tanto, fue sometida a una Cámara Gesell donde terminó contando lo que pasaba puertas adentro de la casa cuando se quedaba con su abuelo. Fue en ese momento que el hombre decide huir.
Condena
La causa recayó en la fiscalía de Delitos Complejos que emitió un pedido de captura rápidamente. La aprehensión por efectivos de Interpol se registró a inicios del mes de mayo de este año en Junín.
Unos siete meses después, tras el acuerdo entre la defensa y la fiscalía, se llegó a un juicio abreviado y una condena.
El acusado recibió 9 años y seis meses de cárcel por el delito de abuso sexual con acceso carnal sobre su nieta.
La querella estuvo conformada por los abogados Nicolás Casas y Virginia Panero, quienes confirmaron que hubo colaboración de las dos partes para poder llevar adelante la audiencia rápidamente.
“El acusado reconoció el hecho, algo totalmente aberrante porque fue un delito continuado”, dijo Casas.
