Córdoba sigue en vilo tras el macabro hallazgo de un cadáver en avanzado estado de descomposición en un departamento en remodelación en Córdoba. El inmueble era habitado por Horacio Antonio Grasso, un expolicía condenado a 27 años de prisión por el asesinato de Facundo Novillo en 2006, quien recientemente regresó a la cárcel de Bouwer por violar su prisión domiciliaria.
Escalofriante: vecinos grabaron a Grasso espiando por las cerraduras
Ahora, la inquietud se eleva con la aparición de videos enviados a ElDoce.tv, que capturan a Jorge Javier Grasso, hermano de Horacio y quien contrató a los albañiles que descubrieron el cuerpo, espiando a través de las cerraduras de diferentes departamentos en otro edificio de Colón al 600.
Los vecinos del complejo han expresado su profundo malestar y temor ante el comportamiento de Jorge Grasso.
Un residente contó a ElDoce.tv que Grasso, quien vivía en el noveno piso, “se llevaba pésimo con todos”, “atormentaba, maltrataba a las chicas que limpiaban, a los de administración” y “generaba un ambiente hostil”.
Añadió que “Las chicas lo denunciaban por acoso, espiaba por las mirillas, abría puertas”, y que “algunas chicas están con botón antipánico, están traumadas”.

El historial de Jorge Javier Grasso no es menor. En diciembre de 2024, fue detenido en un shopping de Ciudad del Este, Paraguay, por robar un bolso con 12 mil dólares.
Tras ser identificado y arrestado, pidió ser tratado como mujer alegando que su documento de identidad figuraba con género femenino, aunque su nombre permanecía igual. Finalmente, fue deportado de Paraguay y se instaló en Córdoba.
La situación añade otra capa de complejidad y preocupación a un caso ya de por sí impactante, donde la identidad del cuerpo hallado sigue siendo un misterio para las autoridades.