El operativo se llevó a cabo durante la madrugada de este viernes, alrededor de las 3.50, cuando efectivos policiales que realizaban recorridas preventivas en el barrio de emergencia observaron al joven en la vía pública. El hecho ocurrió en barrio Zavaleta, Buenos Aires.
El hombre se encontraba cargando varias bolsas de consorcio y mostraba un evidente estado de nerviosismo. Al notar la presencia policial, se acercó a los oficiales y relató una versión de los hechos.
Según su testimonio, estaba viviendo temporalmente en la casa de su hermana, a quien no veía desde hacía años. Afirmó que ella le había confesado dedicarse a la venta de drogas y que, al manifestarle su rechazo, la mujer lo habría amenazado a él y a su familia. Temiendo por su seguridad, el joven aseguró haber ingresado al domicilio para retirar los paquetes de marihuana con la intención de entregarlos a la Policía. En total, se secuestraron 59 ladrillos de marihuana, con un peso total de 43,39 kilogramos. El relato del joven, sin embargo, no convenció a la fiscalía.
Por disposición de la Unidad de Flagrancia Sur, se ordenó el secuestro de la sustancia, su remisión a la División Antidrogas y la instalación de una consigna frente a la vivienda. Horas después, la dueña del domicilio, la hermana del joven, se entrevistó con el personal policial apostado. Ella negó rotundamente todo lo dicho por su hermano y habilitó de manera espontánea el acceso a su vivienda. Con la presencia de testigos, se realizó una búsqueda de estupefacientes dentro de la casa, la cual arrojó resultado negativo.
Tras estas novedades, se consultó nuevamente con la fiscalía, que finalmente ordenó la detención de ambos hermanos. La mujer fue imputada por infracción a la Ley de Drogas, mientras que su hermano quedó detenido por violación de domicilio.