Un hombre de 80 años fue detenido en el barrio Itilco, al sur de Tucumán, acusado de enterrar vivos a cuatro perros recién nacidos en el patio de su vivienda, según informó Infobae.
El caso se conoció este lunes, cuando una vecina alertó a la policía y a un grupo animalista tras escuchar el llanto de los cachorros que habían sido arrojados a un pozo y cubiertos con piedras.
Según informaron fuentes oficiales, el rápido accionar de los rescatistas permitió sacar a los animales con vida.
Los cachorros y su madre fueron puestos bajo resguardo en hogares de tránsito mientras avanza la investigación judicial.
El hallazgo y el rescate
La intervención comenzó luego de que una mujer del barrio llamara desesperada a la policía y a voluntarios de Rescate Animal Aguilares, quienes llegaron al lugar minutos después.
De acuerdo con el grupo animalista, al arribar encontraron un pozo cerrado con piedras y barro.
“Nos tiramos al pozo, cavamos con nuestras manos y uñas para sacarlos. Hacían un llanto desesperado”, relató la organización en un comunicado.
Poco después llegó la Patrulla Motorizada, que tomó contacto con la Fiscalía para iniciar las actuaciones judiciales correspondientes.
Situación de los animales y avance de la causa
Los cuatro cachorros fueron retirados del lugar junto con su madre y se encuentran en buen estado bajo cuidados transitorios.
Los voluntarios comenzaron además una campaña para conseguir adoptantes y garantizar su atención veterinaria.
El propietario de los animales fue trasladado a una dependencia policial y quedó imputado por maltrato animal.
Según fuentes del Ministerio Público Fiscal, habrá una audiencia en las próximas horas para definir medidas cautelares.
La legislación vigente prevé penas de 15 días a un año por este tipo de delitos, generalmente de ejecución condicional, aunque la Fiscalía no descarta solicitar prisión preventiva debido a la gravedad del caso.
Repercusiones y seguimiento
Organizaciones protectoras celebraron el rescate y pidieron que el caso no quede impune.
En paralelo, la causa continúa bajo investigación para determinar responsabilidades y eventuales sanciones.
Los animales, según confirmaron desde Huellitas del Alma de Aguilares, “están a salvo” y permanecen bajo supervisión hasta que puedan ser adoptados.
