Mientras la localidad de Tristán Suárez no sale de su conmoción tras el macabro hallazgo del cuerpo de Claudia del Carmen Scrazzolo, de 38 años, asesinada con signos de violencia, y enterrada en el jardín de su propia casa.
Ahora, la causa dio un paso importante y los forenses lograron determinar, al menos en esta primera etapa, de qué murió la víctima.
Qué reveló la autopsia sobre el atroz crimen en Tristán Suárez
La autopsia realizada al cuerpo de Claudia Scrazzolo determinó que su muerte fue causada por un paro cardiorrespiratorio. Aunque la víctima presentaba golpes en la cabeza y heridas lacerantes en la zona encefálica, los forenses confirmaron que ninguna de estas lesiones fue la causa directa de su fallecimiento.
El análisis forense, según compartió Infobae, detalló que las heridas en la cabeza de Scrazzolo no provocaron hemorragias internas ni fracturas de cráneo. Además, se encontraron golpes en el estómago, aunque no se pudo establecer si eran recientes o antiguos. La víctima también tenía las manos cubiertas de sangre y golpes en el cráneo.
Claudia Scrazzolo fue encontrada envuelta en sábanas y frazadas, y vestía un pijama de color marrón claro. Un detalle distintivo en su cuerpo era un tatuaje de una rosa con un tallo largo en su antebrazo izquierdo, que llevaba el nombre de su hija de 15 años, quien actualmente se encuentra bajo investigación.
La escena del crimen, investigada por la fiscal Lorena González, presentó varios elementos clave:
- En el interior de la casa, se detectaron manchas de sangre y barro, especialmente en el cuarto de la víctima y en el colchón.
- En el patio, la tierra estaba removida y cubierta por unas chapas, revelando el lugar donde se intentó enterrar el cadáver.
- Junto al cuerpo, se encontró un pico con mango de madera embarrado, que se presume fue utilizado para cavar la tumba, de aproximadamente 30 centímetros de profundidad por un metro y medio de largo.
- Los investigadores sospechan que el arma homicida podría ser una maza secuestrada en el lugar, aunque esta no presentaba manchas hemáticas.
El caso está en la órbita de la fiscalía de género, a cargo de González, y ahora sigue su rumbo con el análisis de cámaras de seguridad y teléfonos celulares.
La hipótesis de robo fue descartada al no hallarse objetos faltantes en la vivienda. La atención se centra en el círculo cercano a la víctima, especialmente en su hija adolescente y el novio de esta, de 24 años e identificado como R.D.F., quien fue aprehendido por encubrimiento.
Conmoción en Tristán Suárez por el caso
El cuerpo de Scrazzolo fue descubierto este miércoles, cerca de las 14, luego de que los peritos se apostaran frente a un montículo de tierra removida que había sido cubierto con una chapa en el patio de la vivienda.
A medio metro del sitio, un pico con mango de madera embarrado evidenciaba que la tumba, de 30 centímetros de profundidad por un metro y medio de largo, había sido cavada con esa herramienta. Tras excavar por unos minutos, se confirmó la peor de las sospechas: el cuerpo de la mujer yacía envuelto en sábanas y frazadas.
Scrazzolo tenía cabello negro, de aspecto joven y delgada, describieron los peritos, que vestía un pijama de color marrón claro.
Tenía las manos cubiertas de sangre y golpes en el cráneo. Un detalle que dejó helados a los investigadores fue el tatuaje de una rosa con un tallo largo que recorría su antebrazo izquierdo y que llevaba el nombre de su hija de 15 años, la misma que hoy es investigada por el crimen.
En ese marco, la hija de 15 años de la víctima es uno de los focos principales de la investigación debido a las versiones contradictorias que dio.
Los investigadores creen que, por la brutalidad del ataque, así como por el esfuerzo que implicó arrastrar el cuerpo y la posterior excavación en el jardín, la adolescente no pudo haber cometido el crimen sola.
En el marco de la pesquisa, el novio de la chica, un joven de 24 años, fue detenido inicialmente por encubrimiento, aunque la carátula de su imputación podría variar con el avance de la causa. La adolescente, por su parte, no fue detenida y se encuentra a disposición del servicio de Niñez local, en situación de abrigo para su protección.
