La Policía secuestró en la cárcel de Bouwer 39 teléfonos celulares, siete armas blancas, 17 chips de teléfonos, 11 plaquetas cargadores, varias fichas y cables USB, nueve auriculares y 10 baterías de litio, nueve fuentes de alimentación y varios gramos de marihuana y cocaína, entre otros elementos.
El procedimiento se llevó a cabo en un pabellón en el marco de una investigación por una llamada anónima del mismo complejo en la que alertó sobre ilícitos perpetrados mediante la utilización de los dispositivos incautados.

Posteriormente todo fue puesto a disposición del fiscal del Distrito 1, Turno 3, José Mana.
No es la primera vez que se secuestran celulares y drogas en esa cárcel. De hecho, son numerosas las ocasiones en las que presos, utilizando celulares y chips, cometen diversos ilícitos como estafas y manejo de venta de drogas fuera de Bouwer.