Los padres de Cristian Salteño Villazón, el presunto líder narco de la banda “Los Salteños” que asesinó a un niño de 11 años por una pelea narco en Rosario, fueron imputados este jueves con prisión preventiva por dos años. Se los acusa de amenazar a los familiares de la víctima y tener armas de forma ilegal.
En la misma audiencia que se realizó en el Centro de Justicia Penal de Rosario, fue acusado con prisión preventiva otro miembro de la banda, llamado Walter Segovia. Según informaron fuentes judiciales, el hombre fue culpado por comprar una moto robada y amenazar a unos vecinos para que lo dejaran esconderse en su casa tras una persecución policial.
Los tres fueron detenidos el lunes pasado, el día siguiente al asesinato del niño de 11 años, Máximo Gerez, y de las heridas que la balacera le provocó a tres primos suyos.
Según la acusación de la fiscal María de los Ángeles Granato, Villazón padre y su pareja Campos, amenazaron a familiares cercanos de Máximo el mismo domingo del crimen “con el propósito de causar temor”.
Además, los imputó por la tenencia ilegal de una pistola calibre 22 y 15 cartuchos calibre 38 que les secuestraron el lunes 6, mientras un grupo de vecinos y familiares del niño se manifestaba en la casa de los Villazón, que saquearon y luego demolieron.
El presunto líder de ese clan familiar, Cristian Villazón, cumple desde septiembre del año pasado una condena a 15 años de prisión por un triple homicidio de familiares de otro narco de la zona, recordaron fuentes judiciales.
Por qué empezó la balacera
La pelea se disputó cuando los familiares de los chicos derrumbaron una vivienda de los Villazón, señalada como búnker de venta de drogas.
Según la investigación, Máximo y sus primos estaban tomando algo en la calle en las primeras horas del domingo junto a sus familiares, cuando un grupo de personas pasó por el lugar y disparó contra una casa de la familia Villazón.
Como consecuencia de la balacera fue asesinado Máximo Gerez, y resultaron heridos tres primos suyos, menores de edad.
Para el fiscal que investiga el crimen, Adrián Spelta, el ataque se produjo en medio de una disputa territorial de bandas del narcomenudeo que operan en la zona noroeste de Rosario.
