Este jueves, dos hombres dejaron en un papel tras disparar contra el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) de Rosario, donde había estado internado el hijo del fundador de la banda “Los Monos” tras haber sido baleado en la pierna este miércoles.
“Dylan Cantero, no batas la cana”, decía la nota haciendo referencia al hijo de “El Viejo” Cantero.
Según confirmaron fuentes policiales, los atacantes se movilizaban en una moto y abrieron fuego contra uno de los laterales del hospital, sobre calle Crespo, donde una empleada atendía el conmutador de emergencias.
La mujer resultó ilesa, pero entró en estado de shock al quedar a pocos metros del tiroteo.
El papel fue incautado por efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI), que también levantaron seis vainas servidas y revisaron las cámaras de seguridad por orden del Ministerio Público de la Acusación (MPA).

Los investigadores creen que los agresores pensaban que Dylan Cantero aún estaba internado, aunque el joven había recibido el alta médica este jueves al mediodía tras una serie de estudios. Luego fue citado a declarar ante la Justicia provincial.
Medidas de seguridad
Tras el ataque al hospital, el personal médico del Heca decidió suspender las guardias hasta el viernes, mientras que la Unidad Regional II dispuso reforzar la custodia tanto en el hospital como en el Centro de Justicia Penal.
El caso refuerza la escalada de violencia narco que atraviesa Rosario, donde los mensajes mafiosos y los ataques a instituciones públicas se repiten como advertencias entre bandas rivales.
El ataque a Dylan Cantero
Dylan Cantero, de 21 años, hijo del histórico fundador de la banda narco Los Monos, fue baleado este miércoles por la tarde en el barrio La Granada, al sur de Rosario. El joven recibió un disparo en la pierna derecha y fue trasladado en taxi hasta el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca).

El ataque ocurrió pasadas las 18 en la zona de Caña de Ámbar al 1.800, cuando cuatro personas a bordo de un auto blanco abrieron fuego contra Cantero. Según fuentes policiales, los agresores dispararon al llegar a la intersección con el Pasaje 512, hiriendo al joven integrante del clan Cantero.
En el lugar se encontraron dos vainas servidas, manchas de sangre y varios impactos de bala en la fachada de una vivienda cercana. Efectivos del Comando Radioeléctrico se presentaron en la escena y entrevistaron a Patricia Celestina Contreras, madre de Dylan y ex pareja de Máximo Ariel “El Viejo” Cantero, quien confirmó que su hijo fue blanco del ataque.
Ante la gravedad del hecho y por la presencia de un miembro del clan Cantero, la Unidad Regional II de la Policía montó un operativo de seguridad especial en las inmediaciones del HECA, con efectivos del Grupo Táctico Multipropósito (GTM) y del Grupo de Infantería de Respuesta Inmediata (GIRI), que establecieron un fuerte cerco de seguridad en la zona de avenida Pellegrini y Vera Mujica.
Desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) se dispuso la toma de testimonios, el levantamiento de material balístico y el relevamiento de las cámaras de videovigilancia de la zona para avanzar en la investigación.
Un prontuario temprano
Dylan Cantero había quedado en libertad a finales de 2024, luego de cumplir una condena unificada de tres años de prisión efectiva por dos causas judiciales. Una de ellas data de cuando era menor de edad, por tenencia ilegítima de arma de fuego y encubrimiento de motos robadas. La otra corresponde a un juicio abreviado como integrante de una asociación ilícita, liderada por su sobrino Uriel Luciano “Lucho” Cantero, hijo del asesinado Claudio “Pájaro” Cantero.
Inicialmente, la pena había sido fijada en cinco años y seis meses, pero tras una apelación, el camarista Tomás Orso consideró que la suma matemática era incorrecta y redujo la condena a tres años, permitiendo su salida anticipada.
Este nuevo ataque, que reaviva las tensiones en el entramado narco de Rosario, deja al descubierto una vez más la fragilidad de la seguridad en los barrios del sur de la ciudad y el peso que sigue teniendo el apellido Cantero en la violencia urbana rosarina.