La comunidad de San Antonio de Areco se encuentra conmocionada tras el macabro hallazgo de los cuerpos sin vida de Florencia Revah, de 31 años, y su ex pareja, Esteban Alejandro Suárez, de 45 años, dentro de un Chevrolet Onix blanco.
El suceso, calificado como un femicidio seguido de suicidio por fuentes de la investigación, pone de manifiesto una vez más la brutalidad de la violencia de género.
Los cuerpos fueron encontrados el domingo por la tarde en un camino rural cercano a la Ruta Nacional 8, a solo tres kilómetros del centro de San Antonio de Areco.
El vehículo, sin patentes visibles, estaba estacionado bajo un árbol.
Violencia de género y denuncias previas
La relación entre Florencia Revah y Esteban Alejandro Suárez era, según allegados, “complicada y marcada por la violencia”.
Revah ya había denunciado a Suárez por violencia de género, lo que llevó a que él tuviera que abandonar la casa que compartían en General Pacheco, Tigre, para mudarse a otra vivienda en la misma localidad.
La madre de Florencia Revah declaró ante la Fiscalía de Mercedes que, además de la denuncia por violencia de género, Suárez contaba con una solicitud de prohibición de acercamiento, cese de actos de perturbación y exclusión, medidas que databan de abril pasado.
A pesar de esto, se presume que la pareja habría intentado retomar la relación antes de fin de año.
“Suárez era un tipo muy celoso, la vigilaba constantemente y casi no la dejaba tener redes sociales. Creo que ella tuvo que inventarse una cuenta de incógnito, que él no supiera”, relató una fuente que prefirió mantener el anonimato, describiendo una relación de control extremo.

Otro conocido de Florencia añadió que ella “sabía de una relación sentimental anterior, que también estaba contaminada. Una vínculo tóxico”.
La reconstrucción del femicidio
Según los primeros datos de la autopsia y fuentes de la investigación, el caso se confirma como un femicidio seguido de suicidio.
Florencia Revah presentaba cinco impactos de bala, uno de ellos en el cuello, mientras que Esteban Alejandro Suárez tenía un único impacto en la sien.
Un dato clave aportado por fuentes del caso a Clarin.com es que “el femicidio no sucedió en Areco. Él la trajo muerta en el auto”.
La reconstrucción de las últimas horas indica que Suárez pasó por los peajes de Larena y Solís de la Ruta 8 entre las 7:10 y las 10:15 de la mañana del domingo.
El Chevrolet Onix blanco no tenía pedido de secuestro y estaba radicado en General Pacheco, la misma localidad donde vivían ambos.
Florencia Revah: una vida truncada
Florencia Revah, descrita como “muy linda, buena compañera y muy eficiente en el trabajo”, tenía 31 años.
Se había dedicado a la venta de autos en un reconocido concesionario en Avenida Del Libertador, en la Ciudad de Buenos Aires, y recientemente había cambiado de rubro para vender ventiladores.

Casi no tenía redes sociales, un detalle que resuena con los celos de su ex pareja.
Por su parte, Esteban Alejandro Suárez tenía 45 años y trabajaba en una casa de cambio.
La Policía científica continúa trabajando en el caso, pero las evidencias apuntan a un “caso casi cerrado de femicidio y suicidio”.