Juan Francisco “el Francés” Viarnes es un profesional de la mentira. El hombre de los mil rostros, cuyo testimonio detonó el llamado “narcoescándalo” a mediados de 2013, casi ocho años después continúa generando debate en los Tribunales federales de Córdoba.
Tras ser extraditado desde Paraguay, donde intentó esconderse tras huir de la provincia en 2014, hace tres semanas que Viarnes permanece alojado en la cárcel de Bouwer. Y luego de ser indagado el jueves 29 de abril, ahora el Juzgado Federal N° 1, a cargo de Ricardo Bustos Fierro, ordenó su procesamiento en una causa por dólares falsos, estafas y uso de documento público adulterado. En la misma resolución, se indicó que quedara con prisión preventiva, al ser considerado un imputado “peligroso”, y que se le trabara un embargo de un millón de pesos.
Pero, sobre todo, estos pasos de la investigación están dejando al desnudo otro aspecto en torno de la extraña personalidad de Viarnes. Analizado en retrospectiva, desde que fue detenido el 18 de julio de 2013 acusado de estafar a una familia de barrio Hipólito Yrigoyen, a la que le compró vehículos con dólares falsos, “el Francés” no dejó de abrir la boca y complicar aún más su situación legal.
Si bien en ese momento logró una libertad condicional, momento que aprovechó para montar un show televisivo del narcoescándalo y luego huir hacia Paraguay, por lo que pasó a estar prófugo, hoy se advierte que en realidad no dejó de acumular delitos desde entonces, lo que ahora, de nuevo preso, no le augura el mejor panorama judicial.
Repasemos:
1. Detenido en la alcaidía de los Tribunales federales de Córdoba, acusado por los dólares falsos, pidió hablar y se autoincriminó en el “narcoescándalo”. Apuntó contra policías de Drogas Peligrosas por generar operativos contra traficantes, en los que él actuaba como informante clandestino y testigo oficial, procedimientos que si bien habían sido exitosos en su momento, terminaron por ser anulados. Los policías fueron detenidos e imputados, llevados a juicio y la mayoría de ellos recibió condena. Viarnes también sumó imputaciones en esa causa, por asociación ilícita, extorsión, violación de los deberes de funcionario público en el carácter de partícipe necesario y falso testimonio agravado. El juicio que quedó pendiente para él, ahora lo espera.
2. Acaba de ser procesado en la investigación por los dólares falsos, causa en la que también tiene acusaciones por estafas y por adulterar documentos públicos.
3. De manera conexa, se le abrió otro expediente en el que fue imputado por lavado de dinero producto de las presuntas actividades ilegales que realizaba.
4. En Paraguay estuvo detenido cinco años. Cumplió una condena de un año de cárcel por falsificar un documento público (un carné de conducir) y después permaneció preso mientras se definía su extradición, que se concretó el pasado 22 de abril último.
O sea, fue detenido en julio de 2018 por tres imputaciones y, luego de pedir declarar, terminó con seis acusaciones más en su contra.
Pero esto no es todo. Ahora, al dictarle el procesamiento por aquella primera causa de los dólares falsos, el juez Bustos Fierro remarcó que la acusación en contra del “Francés” no prescribió, porque los plazos se suspendieron apenas lo capturaron en Paraguay y lo acusaron de aquel delito.
“Si bien desde julio de 2013 a la fecha transcurrieron casi ocho años, lo que tornaría que la acción penal se encuentre prescripta en relación a los delitos de estafa y encubrimiento agravado, el hecho de que el 12 de mayo de 2016 haya sido detenido en el extranjero por la comisión de un ‘nuevo delito’, y según él mismo declaró en la indagatoria del 29 de abril último fue condenado por un año en Paraguay, hace que la prescripción de la acción se haya interrumpido, tal como lo establece el artículo 67 inciso a del Código Penal, el día de la detención”, fundamentó el juez.
En ese sentido, remarcó que existe una sentencia condenatoria dictada en contra de Viarnes en Paraguay, “la que se encuentra firme y fue cumplida”.
O sea, si Viarnes no era acusado de ningún delito en Paraguay y se mantenía prófugo, o acaso lograba retrasar la extradición sin haber cometido falta alguna en el medio, hoy tendría estas primeras causas prescriptas.
Pero esto no es todo. Bustos Fierro también ordenó que continúe detenido en la cárcel de Bouwer, ya que lo considera peligroso en libertad, atento a que la última vez que logró una libertad condicionada se escapó a otro país.
“Fundamento la medida de coerción personal en el grado de peligrosidad procesal que el nombrado demostró tener a lo largo del proceso; no debemos olvidar el tiempo que se mantuvo prófugo para este Tribunal y esta causa, como también al momento de ser llamado a juicio por el Tribunal Oral Federal 2. Además, su personalidad es naturalmente elusiva, dada la facilidad con que cambia de identidad, profesión y residencia. Razón por la cual, la única medida de coerción personal que considero eficaz para asegurar los fines del proceso es la prisión preventiva”, apuntó.
Y ordenó un embargo preventivo: “Que para el caso de que sobre el imputado recaiga condena, resulta justo y adecuado trabar embargo sobre los bienes de Viarnes por la suma de un millón de pesos, o en su defecto inhibirlo por igual monto. Ello a los fines de cubrir los gastos y costas que pudieren surgir, luego de una investigación que ha llevado años, se han utilizado distintas fuerzas de seguridad, se han realizado viajes a otras provincias, peritajes sobre billetes y documentación, a lo que sumo cinco años de trámite de extradición con la República del Paraguay, que se hizo efectivo recién el 23 de abril último”.
