Este martes se reanudó el juicio por el crimen de Nora Dalmasso, ocurrido en noviembre de 2006 en Río Cuarto.
Luego de estar internado por problemas coronarios, volvió al recinto Marcelo Macarrón, el único imputado del crimen acusado de ser el instigador del asesinato de su esposa.
Durante unos minutos, el viudo estuvo en el recinto y tenía la intención de permanecer la mayor parte de la jornada del juicio pero por prescripción médica se tuvo que retirar a descansar.
“Yo quiero estar pero mi médico dice que no puedo estar”, dijo Macarrón.
La recomendación del médico cardiólogo Federico Magri es “no someterse a situaciones de estrés emocional ya que las lesiones son severamente estenoticas, se recomienda permanecer en reposo relativo”, expusieron.
El fiscal Julio Rivero dijo que, más allá de su condición de salud, como imputado tiene derecho a no estar presente, no está obligado a permanecer en la sala de audiencias, salvo en algunos momentos específicos.
Otra operación
En el informe se revela que Marcelo Macarrón tiene que volver a ser intervenido del corazón. Tiene fecha para el implante de otro stent, el viernes 10 de junio, a las 8 de la mañana.
Declaró una de las hermanas de Macarrón
Gabriela Macarrón, hermana de Macelo, es una de las testigos que declaró este martes.
“Mi hermano nunca hubiera hecho algo así, mi hermano se llevaba bien Nora”, dijo Gabriela y defendió la inocencia del imputado.
En su alocución, la mujer contó diversos problemas de salud que tuvo ella y varios miembros de su familia, porque el asesinato de Nora “fue una situación traumática que nos desestabilizó a todos”.
Negó que Nora y Marcelo se hayan querido separar, como dice la acusación. Remarcó que estaban renovando su casa. “Mi hermano siempre me contaba todo, yo lo asesoraba en todo. Mi hermano es inocente”.
