La comunidad de Miami se encuentra consternada tras un trágico accidente marítimo que cobró la vida de dos menores y dejó a otros dos en estado crítico. Una de las chicas fallecidas era nada menos que la nieta de Cris Morena, Mila Yankilevich.
La Guardia Costera de Estados Unidos ha iniciado una investigación exhaustiva que pone el foco en una pregunta central: ¿quién tenía la prioridad de paso entre el velero y la barcaza que colisionaron fatalmente en aguas de Miami?.
Este suceso, ocurrido el pasado lunes antes del mediodía, ha encendido las alarmas sobre la seguridad náutica en la región.
Las víctimas y la magnitud de la tragedia
Las víctimas mortales del siniestro náutico son la argentina Mila Yankelevich, de 7 años, y otra niña de 13 años.
Además de estas lamentables pérdidas, dos menores más continúan luchando por sus vidas en estado crítico.
El accidente de Miami ha generado una profunda tristeza y preocupación, mientras el velero involucrado permanece sumergido bajo la barcaza, una imagen desoladora que encapsula la magnitud del desastre.
Reglas de navegación, el pilar de la investigación
La clave para desentrañar las causas de este choque de embarcaciones reside en las Reglas de Navegación de la Guardia Costera, que serán la guía principal del proceso penal y la investigación.
Generalmente, las normativas marítimas establecen que los veleros suelen tener prioridad sobre las embarcaciones a motor en el agua.
Sin embargo, existen excepciones cruciales que podrían haber jugado un papel determinante en esta tragedia en Miami.
El capitán Frank Florio, comandante del Sector Miami de la Guardia Costera, aseguró que la agencia llevará a cabo una “investigación exhaustiva para determinar las causas del accidente e identificar medidas que ayuden a prevenir tragedias similares en el futuro”.
La excepción existente
Uno de los puntos más críticos que la investigación de la Guardia Costera deberá dilucidar es si la barcaza, o más específicamente el remolcador que la empujaba, se encontraba en la categoría de una embarcación “restringida en su capacidad de maniobra”.
Según las Reglas de Navegación, un velero debe ceder el paso a este tipo de embarcaciones.
Las propias reglas definen una embarcación con capacidad de maniobra restringida como aquella que, “por la naturaleza de su trabajo, está limitada en su capacidad de maniobrar según lo requieren estas Reglas y, por lo tanto, no puede mantenerse fuera del camino de otra embarcación”.
Determinar si el remolcador que se aprecia empujando la barcaza en las fotografías del accidente encaja en esta definición será, sin duda, un punto central de la investigación.
La Comisión de Conservación de Pesca y Vida Silvestre de Florida también ha informado que está colaborando en la investigación junto con la Guardia Costera, buscando esclarecer todos los detalles de este devastador accidente náutico en Miami.
La resolución de este caso sentará un precedente importante para la seguridad marítima en la zona.