Francisco Oneto, conocido por defender a Javier Milei en diversas causas y también a Máximo Thomsen -uno de los condenados por el crimen de Fernando Báez Sosa-, se ha incorporado al equipo legal de Leopoldo Luque, el neurocirujano y médico personal de Diego Maradona al momento de su fallecimiento. La incorporación de Oneto a la defensa de Luque se da tras la anulación del juicio que buscaba determinar las responsabilidades por la muerte del astro del fútbol.
Oneto, quien ganó notoriedad en las redes sociales bajo el apodo de “abogado nivel Dios”, confirmó a TN su integración al equipo que recientemente defendió a Luque en el proceso judicial anulado. Este proceso terminó en un escándalo a raíz de la recusación de la jueza Julieta Makintach, integrante del Tribunal Oral N°3 de San Isidro, debido a la filmación de un documental secreto. Anteriormente, Oneto defendió a Milei en el escándalo de la criptomoneda Libra y en otros asuntos de carácter personal. Ahora, trabajará junto a Julio Rivas, quien lidera la estrategia defensiva de Luque, y a sus colegas Mara Digiuni y Pablo Speranza.
Luque, al igual que otros seis profesionales de la salud, estaba imputado por el “homicidio simple con dolo eventual” del astro y es considerado uno de los más comprometidos en la causa. El médico se mostró beneficiado por la anulación del juicio y, días atrás en los Tribunales de San Isidro, había dicho a TN que “Era obvio que iba a ir preso”.
El neurocirujano, quien estaba a cargo de la salud de Maradona el 25 de noviembre de 2020, apuntó contra las hijas del exfutbolista y reivindicó su estrecha relación de amistad con Diego. “Me quieren meter preso porque en un audio dije algo de ellas, pero nosotros, los médicos, hablamos así”, afirmó.
Luque sostuvo que no tendría inconvenientes en enfrentar un nuevo debate judicial. “No lo siento como un peso. No soy responsable de lo que pasó. Camino por la calle y nadie me dice nada”, remarcó. Respecto a su vínculo con Maradona, Luque expresó: “Con Diego éramos amigos. Yo lo quería a él y él a mí. Hablaba mucho conmigo porque estaba solo. La única persona que me podía defender en este juicio ya está muerta”. Agregó que está en esta situación “porque no lo dejé solo” y que, a pesar de ser su médico de confianza, no por eso es “responsable de todo”.
