El grave hecho de maltrato infantil que investiga el fiscal de Instrucción de Villa María, René Bosio, sumó un nuevo capítulo con la detención de la madre del pequeño de 7 años que sufría violencia en su casa, ubicada en zona rural de Tío Pujio.
La mujer quedó imputada por lesiones leves calificadas, mientras que el hombre lo está por lesiones y privación de libertad.
El caso surgió a raíz de una denuncia que formularon las autoridades del Centro Educativo Fray Venancio Taborda, en Tío Pujio, localidad vecina de Villa María. Fueron las docentes quienes observaron signos de violencia y acudieron a la Justicia.
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De manera inmediata, el fiscal Bosio ordenó una serie de medidas que dieron lugar a un allanamiento en la vivienda familiar del niño. Fue entonces cuando personal policial detectó que el menor se encontraba atado a una silla mientras que el padrastro, al observar la presencia de los uniformados, intentaba desatarlo.
El hombre quedó detenido de manera inmediata ese día, el pasado lunes 12, y el fiscal lo imputó por supuesto autor del delito de lesiones leves y privación ilegítima de la libertad.
Dos días después, en la tarde del miércoles 14, Bosio ordenó detener también a la madre del niño, una mujer de 23 años que quedó acusada del delito de lesiones leves calificadas por el vínculo.
La determinación del fiscal fue a raíz de sumar nuevos elementos probatorios que complicaron a la mujer. Puntualmente fueron nuevos testimonios y un informe realizado por una trabajadora social del municipio de Tío Pujio.
Según indicaron fuentes judiciales, la información recabada reveló “conductas activas y omisivas por parte de la progenitora”.
En la vivienda familiar, el pequeño vivía con la madre, su padrastro y hermanos. Estos últimos, menores de edad, quedaron a resguardo de la Secretaría Nacional de la Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), desde el lunes 12.
