Córdoba sigue en vilo tras el macabro hallazgo de un cadáver en avanzado estado de descomposición en un departamento en remodelación en Córdoba.
El inmueble era habitado por Horacio Antonio Grasso, un expolicía condenado a 27 años de prisión por el asesinato de Facundo Novillo en 2006, quien recientemente regresó a la cárcel de Bouwer por violar su prisión domiciliaria.
El calvario de dos jóvenes acosadas por Jorge Grasso
La aparición de videos que capturan a Jorge Javier Grasso, hermano de Horacio y quien contrató a los albañiles que descubrieron el cuerpo, espiando a través de las cerraduras de diferentes departamentos en otro edificio de Colón al 650, destapó ahora otro costado escalofriante.
Se trata de la pesadilla que vivieron dos jóvenes que eran acosadas por este sujeto y cuya madre habló en las últimas horas con El Doce.TV.
“El tipo golpeaba el piso, salía cuando salía ella, la interceptaba en el ascensor, las acosabas continuamente”, manifestó.
La mujer, que pidió mantener su identidad en reserva por temor a represalias, reveló que incluso existía una orden de restricción contra Grasso, pero que la violaba de forma sistemática.
“Le tocaba el timbre a las cinco de la mañana. Mi hija tuvo que desconectar el portero”, recordó. “Lo que nos da bronca es que la Justicia no accionó para nada. Llegó un momento en que no querían tomar más denuncias, pero tampoco hacían nada”, dijo a ese medio.
“Tuvimos que sacar un préstamo. Fue un gasto terrible. Mi hija terminó en el psicólogo. La pasamos muy mal”, recordó con amargura. Todo esto sucedió en 2023.
“Como papás lejos, tenés miedo que les peguen un palo, que les hagan algo. El tipo la esperaba en la escalera, la filmaba”, agregó
“Hay chicas que siguen viviendo ahí, algunas con botón antipánico. Nosotros las pudimos sacar a tiempo, pero hay muchos que no”, advirtió.
“Siento que la Policía y la Justicia tienen algo que ver. No podemos tener a una persona así viviendo entre nosotros”, consideró la mujer. “Parece que esperan que nuestros hijos salgan en bolsas negras para recién hacer algo”, concluyó.
El malestar de los vecinos con Jorge Grasso
Un residente contó a ElDoce.tv que Grasso, quien vivía en el noveno piso, “se llevaba pésimo con todos”, “atormentaba, maltrataba a las chicas que limpiaban, a los de administración” y “generaba un ambiente hostil”.
Añadió que “Las chicas lo denunciaban por acoso, espiaba por las mirillas, abría puertas”, y que “algunas chicas están con botón antipánico, están traumadas”.
El historial de Jorge Javier Grasso no es menor. En diciembre de 2024, fue detenido en un shopping de Ciudad del Este, Paraguay, por robar un bolso con 12 mil dólares.
Tras ser identificado y arrestado, pidió ser tratado como mujer alegando que su documento de identidad figuraba con género femenino, aunque su nombre permanecía igual. Finalmente, fue deportado de Paraguay y se instaló en Córdoba.
La situación añade otra capa de complejidad y preocupación a un caso ya de por sí impactante, donde la identidad del cuerpo hallado sigue siendo un misterio para las autoridades.
