Una investigación en el barrio Alto Comedero de Jujuy desveló un panorama de horror, con el descubrimiento de restos óseos y de piel humana en la vivienda de Matías Jurado, un hombre de 37 años detenido en los últimos días. Los investigadores creen que Jurado podría ser un asesino serial y lo vinculan con la desaparición de al menos cinco personas en la zona.
El espeluznante hallazgo se produjo cuando los investigadores llegaron a la casa de Jurado buscando a personas en situación de calle que habían desaparecido después de subir a un remis con el sospechoso. Lo que encontraron en la vivienda “los espantó”: restos humanos que están siendo analizados por un equipo de fiscales liderado por Guillermo Beller para determinar si están vinculados a estas desapariciones y otras tres ocurridas en la zona.
Un patrón y el testimonio clave de un sobrino
Fuentes del caso indicaron a Infobae que Jurado podría estar detrás de cinco homicidios que comparten los mismos patrones de comportamiento. En la propiedad, el presunto homicida serial vivía con un sobrino de 16 años, quien ofreció detalles cruciales sobre los crímenes. El adolescente, que está siendo asistido por la secretaría de Niñez, reveló que su tío llevaba a personas en situación de calle los viernes y que él se retiraba porque sabía que “pasaban cosas malas”.
Según el menor, Jurado descuartizaba a las personas que ingresaban a su domicilio. Luego, el presunto homicida enterraba algunos restos, quemaba otros para reducirlos y los metía en bolsas de consorcio que tiraba en basurales. El sobrino incluso señaló en una declaración en Cámara Gesell los sitios donde su tío habría ocultado a las víctimas, lo que llevó a los peritos a encontrar restos al realizar excavaciones superficiales. El chico afirmó que Jurado “hace mucho tiempo” cumplía con este macabro ritual, lo que sugiere la posibilidad de más hallazgos y otras desapariciones misteriosas en la zona.
Perfil del sospechoso y sus víctimas
Matías Jurado presenta al menos tres tatuajes en el torso (una telaraña y dos nombres) y una cicatriz vertical en el estómago, además de varias heridas corto punzantes en la zona abdominal. El detenido tiene un historial criminal, habiendo estado preso en varias ocasiones y cumplido diversas condenas por robos violentos con armas. Su primera condena fue como menor a los 17 años, y la última en 2018, de la cual salió libre en 2021.
Los detectives reconstruyeron que los viernes eran el día elegido por Jurado para atraer a sus víctimas. Les ofrecía trabajo (como “changas” en la terminal) o alcohol, y así los llevaba engañados a su casa. Vecinos del sospechoso confirmaron que los viernes Jurado ingresaba a su casa con personas en situación de calle.
Investigación en Curso y Posibles Identificaciones Este lunes, Jurado será imputado por el homicidio de un hombre de apellido Anachuri, la última persona desaparecida y con quien fue registrado en video subiendo a un remis. La nómina de víctimas, en orden cronológico, la completan hombres identificados como Ponce, Quispe, González, Sosa.
Se está buscando el ADN de las víctimas en los restos hallados, incluso de sangre diluida en combustible. En la escena del crimen, los detectives encontraron una carretilla, bolsas, una pala, ollas, herramientas de jardinería, imágenes religiosas y gran cantidad de ropa desordenada sobre un colchón, y se sospecha que algunas prendas podrían pertenecer a las víctimas. La División de Búsqueda de Personas de la Policía de Jujuy continúa trabajando en el caso, supervisada por el fiscal general Sergio Lello Sánchez. Antropólogos esperan extender su trabajo esta semana.