Un grave incidente ocurrido en el Hospital Materno Infantil “Dr. Héctor Quintana” de Jujuy mantiene conmocionada a la provincia. La Justicia investiga a un enfermero que inyectó leche por vía intravenosa a un bebé de seis meses, buscando determinar si fue un accidente o un acto intencional.
El sospechoso, cuya identidad no fue revelada, se encuentra detenido con prisión preventiva y fue imputado por el delito de “lesiones graves agravadas por alevosía”. Este cargo podría implicar una pena de entre 8 y 15 años de cárcel.
Según la reconstrucción de los investigadores, el enfermero colocó leche en la vía intravenosa del menor, que debería haber llevado suero. La madre del bebé, Alejandra Argota, relató que el enfermero, a quien no conocía, le administró 60 mililitros de leche a través de una sonda conectada en su brazo, ya que el niño estaba internado con una sonda nasogástrica para alimentarse. La madre descubrió lo ocurrido al ver que la manguera del suero contenía leche mezclada con sangre. “Le dije que confié en él y se fue. No lo vi más”, contó la madre, agregando que están “destruidos” y pidiendo una cadena de oración.
Inmediatamente después de la inyección, el bebé se descompensó. El personal médico logró estabilizarlo. La mamá explicó que los médicos le dijeron que el ingreso de leche al torrente sanguíneo podía haber causado un paro cardíaco, afectando órganos vitales. Afortunadamente, el menor, de seis meses, permanece internado pero estable. Aunque las primeras horas fueron críticas, el riesgo de muerte ha disminuido y se evalúa su traslado a una sala común. Se seguirá su estado de salud para detectar posibles secuelas.
La investigación, liderada por el fiscal Guillermo Beller, considera varios elementos clave. Se aguardan los resultados del análisis de las cámaras de seguridad del hospital y del teléfono del enfermero. Los informes psicológicos del acusado también son cruciales para la causa.
Un dato relevante que surge de la investigación es que el enfermero, que cuenta con 13 años de experiencia, tenía dos sumarios previos en el hospital. Tras recibir la última sanción, había sido removido de su área de trabajo habitual al área maternal, justamente donde ocurrió el incidente con el bebé. Si bien el fiscal Beller calificó inicialmente el hecho como “aislado”, aclaró que no se descarta que haya sido una acción deliberada.