El jueves pasado se realizó una competencia singular en el ámbito judicial, la 1ª Competencia de Alegatos Córdoba 2025, un certamen que hizo participar a estudiantes avanzados de las cinco universidades locales, lo que se constituyó en una didáctica simulación de juicios orales.
Los jóvenes no estuvieron solos sino que contaron con un jerarquizado plantel de autoridades del derecho que actuaron como jurados o que simplemente asistieron a interesantes “conclusiones” presentadas por los futuros abogados.
El novedoso evento, por iniciativa del Colegio de Abogados de Córdoba, contó con la declaración de interés por parte de la Municipalidad de Córdoba.
La oralidad, la argumentación persuasiva y la solvencia técnica fueron los ejes centrales de esta experiencia académica que convocó los alumnos de las facultades de Derecho de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), la Universidad Católica de Córdoba (UCC), la Universidad Siglo 21, la Universidad Blas Pascal (UBP) y la Universidad Kennedy.

El viceintendente Javier Pretto, al entregar la distinción, destacó la importancia de estos espacios. Pretto subrayó que se trata de un “espacio formativo que vincula el conocimiento jurídico con la práctica real del ejercicio profesional, acercando la justicia a la sociedad”. Este reconocimiento oficial reforzó el rol del Colegio como articulador entre el sector público, la sociedad civil y la academia.
Alta exigencia
La competencia, más allá de su resultado, se transformó en un aprendizaje colaborativo de máxima exigencia, como lo pretende el Colegio de Abogados en su compromiso por contribuir a la formación de excelencia.
Cada equipo universitario se preparó intensamente con el apoyo de 16 tutores docentes, quienes guiaron a los estudiantes en un proceso que combinó la investigación rigurosa, la elaboración de estrategias procesales y la práctica argumentativa. La simulación de audiencias con el mayor realismo posible preparó a los jóvenes para los desafíos reales de los tribunales.
También resulta interesante que esta iniciativa, además de la organización de la entidad colegiada, cuenta con el compromiso explícito del Poder Judicial, la Asociación de Magistrados y Funcionarios Judiciales de la Provincia de Córdoba. Acaso esta convergencia institucional entre la abogacía organizada, la academia y la judicatura sea uno de los mayores logros de la competencia.
Jóvenes competidores
Los jóvenes “abogados” simularon juicios orales en los fueros más complejos de la práctica, penal, labora y civil y comercial.
Estos alegatos fueron pronunciados ante un jurado de lujo y alto nivel técnico, compuesto por magistrados, fiscales y miembros de las salas académicas del Colegio, los cuales aplicaron su óptica exigente.
Según se indicó, la evaluación de las exposiciones tuvo en cuenta la argumentación jurídica de fondo, la claridad expositiva, la capacidad de refutación y la solvencia técnica de cada intervención.
Jurado de jerarquía
Además de esa mirada y la exigencia en la evaluación, los jurados evaluadores ofrecieron a los estudiantes competidores devoluciones que también sirven para su aprendizaje.
Con sólo repasar los nombres de cada cuerpo de jurados, según el fuero, se entiende la jerarquía de la experiencia. En el ámbito penal estuvieron el camarista Eugenio Pérez Moreno, el fiscal de instrucción Guillermo González, los fiscales de cámara María de los Milagros Gorgas y Gustavo Arocena y los abogados penalistas Maximiliano García y José D’Antona. Su participación fue crucial para recrear la dinámica y las exigencias del litigio penal oral.

En el fuero laboral fueron jurados Pablo Martín Pecchio, Cristian Requena, María Sol Guzmán Manzotti y María Celeste Francile, aportando su visión sobre una rama del Derecho que exige gran sensibilidad social y precisión técnica.
El jurado de Civil y Comercial tuvo como jurados a María Clara Cordeiro, Manuel Esteban Rodríguez Juárez, Gustavo Andrés Massano, María Eugenia Jimenes, Federico Martín Arce y Lucía Irigo.
“Compromiso con la excelencia”
En el cierre de la jornada, el presidente del Colegio de Abogados, Eduardo Bittar, reafirmó el compromiso de la institución con la excelencia y la preparación profesional.
Bittar destacó la importancia fundamental de la oralidad en el sistema judicial contemporáneo, trascendiendo incluso el auge de las nuevas tecnologías.

“Con esta competencia reafirmamos nuestro compromiso con la excelencia académica y con la preparación de los futuros abogados y abogadas de nuestra provincia,” manifestó el titular de la entidad colegiada.
El presidente de Abogados enfatizó que la interacción lograda en el encuentro es un factor de doble enriquecimiento: “La interacción entre estudiantes, docentes y magistrados enriquece no solo la práctica profesional, sino también el espíritu de la justicia como bien común.”
El mensaje de Bittar se centró en el valor insustituible del ejercicio profesional en la era digital. “Hoy, más que nunca, la oralidad en los procesos judiciales cobra una importancia decisiva, incluso en tiempos atravesados por la inteligencia artificial,” afirmó.
Bittar concluyó con una frase que resonó en el auditorio: “Porque es en la palabra viva donde se reflejan la transparencia, la contradicción y el derecho de defensa.”