Hace algunos años atrás, Diego Pérez había salvado su vida de milagro luego de impactar con su moto contra un volquete en una calle de Villa Carlos Paz.
Después de algunas semanas de estar internado, su cuadro mejoró hasta que ya no hubo riesgo de vida. Se recuperó y volvió a su vida normal junto a su familia.
El pasado 18 de octubre, otro grave siniestro vial lo tuvo como protagonista pero esta vez el destino fue una fatalidad.
El joven de 24 años murió mientras conducía su auto, un Volkswagen Gol, que fue impactado por otro coche de la misma marca en el cruce de la avenida San Martín y Gobernador Alcorta, en la misma ciudad.
El otro conductor era un policía en actividad que, según se constató luego, manejaba alcoholizado.
La causa recayó en la Fiscalía del Segundo Turno, a cargo de Ricardo Mazzucchi, quien ordenó su detención y lo imputó de homicidio culposo.
En las últimas horas hubo novedades en la causa: el fiscal agravó la imputación por homicidio por dolo eventual y le dictó la prisión preventiva. El efectivo policial de 24 años, del que no trascendió su identidad, sigue en la Cárcel de Bouwer.
El hecho ocurrió en la madrugada del sábado 18 de octubre, en el cruce de San Martín y Vélez Sarsfield, cuando el Volkswagen Gol que manejaba Pérez fue embestido de costado por un Gol Trend conducido por el efectivo, que circulaba de civil y acompañado por dos personas.
El impacto provocó el vuelco de uno de los autos. La víctima murió horas después en el Hospital Gumersindo Sayago.
En un primer momento, el policía había sido imputado por homicidio culposo.
Sin embargo, tras semanas de reclamos, marchas y pedidos de la familia, la Fiscalía analizó pruebas y actualizó la calificación penal.
Fuentes del entorno de los allegados confirmaron que ya recibieron la notificación formal y que la decisión generó alivio, porque consideran que bajo esta figura el proceso ofrece mayores garantías de que el caso avance y no quede archivado.
El joven agente, residente en Villa Carlos Paz y con funciones en Córdoba capital, seguirá detenido en la cárcel de Bouwer mientras avanzan las medidas de instrucción.
La familia de Diego hizo varias marchas de protesta en reclamo de justicia y el cambio de la acusación.
En este punto, remarcaron que la presencia de alcohol en sangre del conductor y la velocidad a la que circulaba constituyen elementos claves que justifican la imputación más grave.
En las últimas semanas, amigos, vecinos y distintos colectivos sociales realizaron movilizaciones en el Reloj Cucú, la Departamental Punilla, el Centro y los Tribunales de Villa Carlos Paz para exigir justicia.
La hermana de Diego señaló que el cambio de carátula significa que “se empieza a reconocer la gravedad real del hecho” y que la familia ve la decisión judicial como un paso fundamental para que la muerte del joven no quede impune.
