Lo que simulaba ser un frasco de un complejo vitamínico detectado en el aeropuerto de Córdoba terminó develando un novedoso diseño de droga sin antecedentes de ingreso a la Argentina, valuado en 22,5 millones de pesos, y en una investigación con alcance internacional, vuelos sospechosos a Europa y un detenido en España.
Uno de los sospechosos de participar en la maniobra, Matías Iván Varela Techera (22), sufrió un revés judicial al ser procesado (sin prisión preventiva) por contrabando agravado en grado de tentativa, transporte de estupefacientes y tenencia de drogas para comercialización. También fue embargado por un millón de pesos, de acuerdo con el fallo que se conoció ahora.
No eran vitaminas
La mañana del 3 de julio del año pasado, los agentes de Aduanas del aeropuerto Ambrosio Taravella notaron algo extraño en la valija que llevaba Santiago Matías Rey, quien iba acompañado por Varela Techera. Habían arribado a Córdoba (por primera vez) en un vuelo de LAN, procedente de Chile, pero con embarque inicial en Madrid, España.
Los efectivos de la Aduna observaron que el escáner mostraba un posible producto de composición orgánica (no es la primera vez que el dispositivo permite incautar drogas). Al abrir la maleta de Rey, encontraron un envase de color negro con la inscripción "XT5 Refuel".
En su interior, hallaron 42.215 comprimidos de "micropunto de estrella roja" (de tres y de cuatro milímetros de diámetro), dietilamida de ácido lisérgico (LSD) de máxima pureza, con un potente olor, valuados en 22,5 millones de pesos.
Visiblemente nervioso, Rey dijo que había comprado el producto por 50 euros para un presunto amigo, aunque no especificó su nombre. El frasco tenía rotulado un contenido de 1.044 gramos, cuando el pesaje de Aduana arrojó 1.695 gramos, un dato que aumentó las sospechas sobre Rey. Los comprimidos secuestrados diferían, incluso, de los que aludía la descripción de la etiqueta.
Otras de las incongruencias que valoró el juez federal N° 1 de Córdoba, Ricardo Bustos Fierro, al procesarlo es el monto pagado por el pasaje aéreo: mientras que, en primera instancia, dijo que no lo recordaba, luego mencionó que se lo había comprado un amigo.
Los micropuntos fueron secuestrados, pese a que no estaba confirmado que se trataba de LSD en un muy alto grado de concentración, algo que quedó demostrado por el posterior peritaje de la Policía Federal. Por el diseño deliberado, la sustancia resiste totalmente la disolución de sus grageas en los reactivos disponibles en la Dirección General de Aduanas, por lo que no pudo ser detectada en el aeropuerto.
Viajes y más droga
Rey no fue detenido y el fiscal federal N° 1, Enrique Senestrari, decidió investigar la posible participación de otros en el descubrimiento del millonario secuestro de LSD o en otros delitos relacionados.
Los investigadores de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) montaron seguimientos tanto a Rey como a sus contactos. Recabaron datos sobre domicilios, fotos y vehículos en los que se manejaban.
Poco más de tres meses del hallazgo en el aeropuerto, la PSA detectó que el 10 de octubre Rey había viajado desde Ezeiza hasta Madrid. Dieron aviso a la consejera de Seguridad de la Policía Nacional de España, María De Vega, y a la Policía Nacional sobre ese viaje con la sospecha de que habría regresado al país europeo para adquirir nuevamente droga de diseño.
Luego de un seguimiento de siete días, Rey cayó en el aeropuerto madrileño de Barajas cuando iba a tomar un vuelo hacia San Pablo, Brasil. Llevaba cuatro recipientes con éxtasis/metanfetamina disueltos.
La pesquisa permitió trazar una vinculación entre Rey y Varela Techera, de acuerdo con los registros fílmicos de los aeropuertos de Ezeiza y de Córdoba. Para el juez, ambos tuvieron en su poder las 42.215 pastillas de LSD con el propósito de ingresarlas al país desde Chile a Córdoba.
Los registros de Migraciones muestran que ambos viajaron juntos a España (el 22 de junio de 2019) desde Ezeiza y que el 3 de julio llegaron a Córdoba desde Chile. Las cámaras los captaron caminando antes de embarcarse rumbo a Madrid y conversando, en su regreso a Córdoba, en la zona de búsqueda del equipaje.
Los dos ya habían “coincidido” en otros viajes a Europa en 2018: uno desde Ezeiza con destino a Italia (Rey partió dos días antes que Varela Techera). Vía España, retornaron al país con diferencia de tres días.
El fiscal profundizó la investigación y allanó el departamento de Varela Techera en la ciudad de Buenos Aires, donde se encontraron 16 comprimidos de éxtasis, varios envoltorios con cocaína, ocho plantas de cannabis sativa (marihuana) y 254 troqueles de metanfetamina. También se secuestraron 10.400 dólares y 149 mil pesos.
"La prueba colectada permite concluir que Varela Techera tenía la sustancia en su poder para su comercialización. No es solo por la cantidad de droga secuestrada, sino, y sobre todo, por los distintos tipos de drogas –éxtasis, cocaína, metanfetamina y marihuana–, que aumentan la lesividad al bien jurídico establecido por los delitos de narcotráfico", afirmó el juez.
Y puntualizó que la tenencia de dólares y el monto de pesos hallados son compatibles con la finalidad de comercialización de drogas, cifra que no podría justificar. Bustos Fierro rechazó el planteo defensivo que planteaba que la droga y los dólares eran de su padre fallecido, debido a que no hay registros del deceso y la dirección del hombre es distinta a la del departamento del imputado (el muchacho dijo que allí vivía su padre).
Una moto cara
Pese a declarar ingresos mensuales de entre 25 mil y 35 mil pesos (aunque sin ninguna actividad económica comprobable), llamativamente logró comprarse una moto KTM 250 Duke, valuada en 450 mil pesos, tras su regreso de España. Para la PSA, la adquisición “resulta incompatible con el estilo de vida que ostenta”.
Un detalle que integra el cuerpo probatorio que el juez le adjudica. Varela Techera registra en su perfil de Instagram imágenes de potes de complejos vitamínicos similares al incautado con miles de micropuntos de LSD.
El juez lo procesó (sin prisión preventiva) por contrabando agravado en grado de tentativa, transporte de estupefacientes y tenencia de drogas para comercialización, y lo embargó por un millón de pesos. Pero le dictó –parcialmente– la falta de mérito por encubrimiento.
El magistrado, sin embargo, no se refirió a la situación procesal de Rey, quien sigue detenido en España y sobre quien pesa un pedido de extradición a la Argentina.
En su fallo, pidió a la Aduana que incluyera en su presupuesto de este año los recursos para adquirir un equipamiento electrónico (espectrómetro de imagen Truna) para la detección de nuevas sustancias sintéticas en los aeropuertos del país (Córdoba lo solicitó).
El aparato fue declarado por Naciones Unidas como detector electrónico de sustancias sintéticas y recomienda su utilización a todas las fuerzas de seguridad del mundo.
En esa línea, Bustos Fierro mencionó que el Laboratorio Europeo para la prevención de la Drogadicción reconoce unos 600 nuevos compuestos sintéticos con efectos psicoactivos.
