Tras más de 34 horas de tareas de búsqueda, el cuerpo sin vida de Santiago Alejandro Haedo fue hallado flotando en el mar este domingo a la tarde, cerca del lugar donde desapareció en la madrugada del sábado. El joven de 22 años había ingresado al agua junto a un grupo de amigos en la localidad bonaerense de Necochea, en un sector cercano al exbalneario Sotavento, cuando fue arrastrado por la corriente.
Santiago, oriundo de Ramón Santamarina, había disfrutado de una noche en la playa tras haber jugado un partido de fútbol y compartir tiempo con sus amigos. Alrededor de las 4 de la mañana, el grupo decidió ingresar al mar, sin la presencia de los guardavidas, ya que no era horario de servicio. Mientras los amigos de Haedo lograron salir sin problemas, él fue arrastrado por la corriente, iniciándose una búsqueda desesperada.
El operativo de rescate, que involucró a personal de Prefectura Naval Argentina, Defensa Civil, Policía de la Provincia de Buenos Aires y equipos de rescate, se extendió por un amplio radio de búsqueda, tanto en tierra como en el mar. Las condiciones del mar y el clima complicado dificultaron aún más la tarea de localización.
A las 17 del domingo, el cuerpo de Santiago fue avistado por bañistas y guardavidas a unos pocos metros del exbalneario Sotavento, lugar donde había sido visto por última vez. De inmediato, el cuerpo fue trasladado al Hospital Municipal Dr. Emilio Ferreyra para su identificación y las pericias correspondientes.
El director de Defensa Civil, Augusto Fulton, informó sobre el hallazgo y confirmó que el cuerpo fue encontrado en el área cercana a las letras de Necochea. El secretario de gobierno del municipio, Jorge Martínez, acompañó a la familia del joven y expresó que las condiciones del mar y la corriente complicaron el rescate.
La tragedia comenzó en las primeras horas del sábado, cuando Santiago y sus amigos decidieron ingresar al mar tras haber bebido alcohol. De acuerdo con los testimonios de los amigos, mientras ellos pudieron regresar a la orilla sin problemas, Santiago desapareció rápidamente de la vista. Ante la falta de noticias, los amigos alertaron a las autoridades a las 7:30, momento en el cual no había guardavidas en la zona.
El joven, que padecía asma y usaba inhalador, fue visto por última vez cerca de la intersección de la Avenida 2 y Pinolandia. La búsqueda se extendió por tierra y mar, con patrullajes realizados por Prefectura Naval y otras fuerzas de seguridad. La presencia de algas y las fuertes corrientes en la zona dificultaron aún más la localización del joven.
El caso está siendo investigado por la UFI Nº1 de Necochea, a cargo del fiscal José Chipoletti.
