Noé Germán Pasciuto es un joven cordobés que desapareció en Europa. Sus padres viajaron a Mallorca para buscar indicios que los lleven a su paradero. En 2012, por teléfono, se despidió de ellos y dijo que iniciaría un camino de desapego. Luego, perdió contacto con sus familiares y amigos. Tiempo después, fue encontrado por la Policía viviendo en la calle y sin documentos. Aunque su desaparición parece ser deliberada, sus padres están preocupados por su salud mental y física.
En 2007, mientras cursaba ingeniería química en la Universidad Nacional de Córdoba, Noé habló con Pascual y María, sus padres, y les dijo que quería hacer un viaje por Europa. El joven, que tiene doble ciudadanía argentina e italiana, recaló primero en Mallorca, España y en los meses sucesivos estuvo en Italia, Alemania e Inglaterra.
Un camino de desapego
Cinco años más tarde, mientras estaba en Reino Unido, tomó una decisión y se la comunicó por teléfono a sus padres. Les agradeció por todo lo que habían hecho y les dijo que iba a dejar de estar en contacto con amigos y familiares, que quería comenzar un “camino de desapego”.
“Es como que le llenaron la cabeza. No sé qué le pasó”, afirmó su padre en una entrevista a Clarín. Luego de su despedida, Noé salió de todas sus redes sociales y se desvinculó de todo el mundo.
Al principio, Pascual y María pensaron que era una cuestión pasajera, de unos meses, pero el tiempo pasó y no recibían noticias de Noé.
La familia apunta a una secta con la que el joven se habría vinculado en Inglaterra.
Consultados sobre este punto, desde la ONG Desaparecidos dijeron a La Voz: “Ignoramos el nombre concreto de la secta. Hay varios movimientos que manipulan la voluntad a través del desapego familiar en primer lugar, lo cual fue notorio en el caso de Noé, alejándose de su familia, cambiando su aspecto físico y en las creencias que siempre había mantenido.”
Tras radicar una denuncia de persona desaparecida, los familiares del universitario lograron que la Interpol lo incluyera en sus alertas amarilla.
Así fue que en 2016, la Policía italiana les informó que habían identificado a Noé en Roma, donde estaba renovando documentos. Sin embargo, el joven expresó que no estaba perdido sino que no quería tener contacto con nadie, por lo que la policía levantó las alertas.
Desorientado y en situación de calle
Su hermana Mely, que estaba viviendo en Barcelona, voló inmediatamente a Roma para encontrarse con su hermano.
Al llegar, tuvieron un encuentro que ella calificó de emotivo y afectuoso, luego del cual salieron del consulado y Noé le mostró el lugar donde estaba durmiendo: la calle.
El muchacho volvió a desaparecer y Mely regresó a Barcelona, pero le expresó su preocupación a Pascual y María.
La madre de Noé, Marina, afirma que Melina no vio a Noé en buen estado. “‘Mamá, él no está bien’, me dijo mi hija Melina, que es la última que lo vio”, dijo la mujer. “Noé no hilaba bien las conversaciones. Fue en noviembre de 2016, el último rastro que tuvimos. A partir de ahí seguimos con la búsqueda, pero Interpol le dio la baja porque lo habían encontrado y él había manifestado que no quería vincularse con la familia”, indicó.
El último registro del paradero de Noé es de 2018, cuando los mossos d’esquadra, la Policía catalana, lo detuvo en Barcelona. El joven había tramitado un documento provisorio con una dirección falsa, por lo que fue demorado. Sus padres se enteraron en septiembre de 2021, por una comunicación con las autoridades del Consulado argentino en Palma de Mallorca.
María sostiene que los policías lo detuvieron, “le sacaron una foto en la que tiene la mirada perdida y se lo ve muy desmejorado (...) y luego nos dijeron que lo habían demorado, llevado a un psiquiátrico y que de allí se había escapado”.
Campaña de búsqueda en España
En septiembre pasado, Pascual y María viajaron desde Córdoba hasta Palma de Mallorca para darle impulso a la búsqueda. Llevan adelante la tarea junto a la organización SOS Desaparecidos, una ONG española dirigida por Joaquín Amills, padre de un joven español desaparecido en 2008.
Sin embargo, los padres de Noé no tienen ciudadanía europea, por lo que tendrán que volverse antes de cumplir seis meses en España. Antes de eso esperan lograr algún resultado.
Este diario intentó comunicarse con ellos, sin éxito. La intermediaria dijo que no quieren dar más notas, que están muy angustiados y que Pascual no se siente bien.
A través de SOS Desaparecidos, se ha reforzado la campaña de búsqueda a través de medios de de comunicación de toda España, pero fundamentalmente de las islas Baleares y Cataluña.
En un video de YouTube que realizaron con motivo de la búsqueda de Noé, sus padres claman: “A quienes lo vean, que le hagan saber que tiene unos padres que hace años que lo están buscando y que con mucho sacrificio logramos llegar acá, a España, y no nos queremos ir sin él”.
Datos para encontrar a Noé
Noé Germán Pasciuto está desaparecido desde el 20 de septiembre de 2017. El último lugar donde se lo ubicó fue en Barcelona. Actualmente tiene 35 años mide 1,75 metros, pesa 70 kilos, tiene cabello castaño, ojos verdes, complexión delgada y se hallaba en situación de calle. Quienes puedan aportar algún elemento a la búsqueda deben comunicarse por correo electrónico a info@sosdesaparecidos.es o por WhatsApp al +34649952957
