En la causa del asesinato de Gabriela Stefi Pérez (24) el pasado sábado en el club Yapeyú durante un acto sindical, muchos personajes relacionados con la investigación se refieren al “video de TN” como el que muestra con precisión y crudeza lo que sucede durante la ráfaga de disparos que ingresa desde la calle.
En el registro de una cámara de seguridad editado y emitido por El Doce TV primero y reproducido además por la señal de noticias nacional se permiten resaltar algunos detalles que a simple vista no se observan si no es con una mirada muy detenida.
El plano general de la cámara abarca casi la totalidad del conjunto de mesas donde los asistentes están sentados mientras comen el asado convocado por la dirigencia del gremio de limpieza, Soelsac.
En círculo rojo se remarca el sector donde está sentada Gabriela (de espaldas, cabello castaño largo, sin atar) y a su derecha a otra joven de similares características.
Luego, desde la calle -margen izquierdo, más iluminado- parecen provenir los disparos porque en ese momento todos giran hacia ese sector, particularmente quienes están de espaldas, como Gabriela. Se ve a ella que gira hacia su izquierda y allí -según la reconstrucción- deja expuesta su clavícula izquierda.
Con la masa de un proyectil que casi seguro es 9 milímetros, se ve que ella es volteada hacia la derecha. La gente se levanta para irse y a ella no se la ve más porque ha caído bajo la mesa mientras las otras personas corren para guarecerse, en dirección contraria (derecha) a los disparos que vienen de la calle (izquierda).
Según la autopsia, la bala calibre 9 milímetros quebró la clavícula izquierda de Gabriela (ese golpe la derrumbó), seccionó una arteria cercana al cuello y se deduce que al golpear con el hueso el proyectil “baja” dentro de su cuerpo y perfora ambos pulmones.
Más tarde, se aprecia a la hermana de Gabriela, Dalma, que comienza a saltar y hacer gestos para que auxilien a la víctima, que no se ve porque sigue tendida en el piso. Dalma desespera y llega a levantar y tirar una silla naranja.
Algo muy curioso que marcan desde la investigación y que tiene que ver con el “origen” de los disparos, es que la gente que se levanta y sale corriendo para huir de la zona de fuego no tiene nada en sus manos. Los investigadores con esta y otras cámaras -en total cinco del club-, cotejaron que todos y cada uno de esos asistentes no están armados y que sus manos se aprecian libres.
Peritajes negativos
En la entrevista que la fiscal Silvana Fernández dio este jueves a la mañana a los periodistas reconoció que se hizo de teléfonos de numerosos asistentes.
Pero lo más significativo es que también hicieron pruebas de “dermotest” que buscan detectar autores de disparos de armas de fuego. El peritaje, que dio negativo en todos los que estaban en el interior del salón, busca partículas de plomo y otras sustancias compatibles con la manipulación de un arma de fuego es disparada.
El video, más estos peritajes y las pruebas balísticas siguen indicando lo que algunos se empecinan en negar: los disparos provinieron de un sólo lugar, del exterior del salón.
El primer video que trascendió muestra a un hombre de mediana edad parapetado detrás de un automóvil que disparo hacia el salón por una abertura de la entrada. Está parado en la vereda del frente del club y en pocos segundos descarga numerosos disparos.
Si bien no hay certeza total, se presume que los disparos son 10 y se dice que todos provienen de la pistola 9 milímetros que se ve en el video.
Con relación al autor, se indica que huyó por el mismo lugar que llegó -una calle lateral- y que a pocos metros de allí lo estaba esperando un automóvil.
Fuentes de la investigación se mostraron optimistas en avanzar en su identificación.
