El tránsito, la forma en que se maneja y el desprecio por la vida ajena y propia siguen siendo una pésima realidad en la provincia de Córdoba: al menos 90 personas ya han muerto en el primer trimestre del año en choques, vuelcos y otros siniestros viales. Con los 34 fallecidos registrados en enero, los 29 muertos de febrero y los 27 casos de marzo, se trata de un muy mal comienzo de año en materia de tránsito.
El primer trimestre de 2024 había dejado un saldo de 74 víctimas fatales por inseguridad vial, mientras que el mismo período de 2023 había arrojado 83 fallecidos, según los registros propios de La Voz contrastados con informes oficiales. La mayoría de los dramas sucedió en el interior.
A todo esto, abril ya tuvo al menos siete fallecidos por distintos siniestros, con lo que 2025 ya acumula 97 víctimas fatales en 98 días. Dicho de otra manera: una vida se apagó prácticamente cada jornada por causas tan evitables como las del tránsito.
En décadas pasadas, los registros eran más funestos: había en promedio dos muertos cada jornada. De todos modos, esta baja en los saldos fatales no puede ser consuelo si se tiene en cuenta que cada 24 horas, promedio, una familia queda pulverizada por haber perdido a un integrante; y otra, por haberlo causado.
En paralelo a estas cifras funestas están aquellos que protagonizaron un choque y sobrevivieron, aunque varios de ellos con serias secuelas físicas y psicológicas.
Si bien las investigaciones están abiertas, la mayoría de las sospechas apuntan a máximas de velocidad que no fueron respetadas, además de maniobras imprudentes o temerarias. En varios de los dramas, el alcohol estuvo presente, según fuentes oficiales.

Muertes en vías rápidas
Tal como viene sucediendo en los últimos tiempos, la mayoría de las muertes viales se sigue registrando en rutas, autopistas y autovías de la provincia.
En este primer trimestre, hubo 47 fallecidos en vías rápidas de distintos puntos de la provincia de Córdoba, mientras que hubo 31 muertos en calles y avenidas (ámbitos urbanos), según los registros del diario. Un dato: varias de esas avenidas tienen un alto caudal y se circula a altísimas velocidades.
De esta manera, el 52% de las muertes de este año sucedió en una vía de alta velocidad.

Al analizar en profundidad, surge un dato que no deja de preocupar: la mayoría de los siniestros fueron choques frontales en rutas. Es decir, alguien se cruzó de carril.
El segundo tipo de siniestro más registrado fueron derrapes seguidos de vuelcos y hasta choques contra objetos fijos. Es decir, un conductor que pierde el control del volante y se va de la carpeta asfáltica por lo general en una curva.
Al analizar la cantidad de muertos en rutas durante el trimestre, surge que hubo 19 casos fatales en enero, 11 en febrero y 17 en marzo. Marzo tuvo casi tantos fallecidos como el primer mes del año (plena etapa estival).
Al contrastar con las muertes urbanas, surge que hubo 12 fallecidos en enero, 14 en febrero y 5 en marzo.
Desastres en rutas
Este 2025, como viene sucediendo hace años, tuvo varias colisiones en rutas con saldos fatales múltiples.
El peor caso fue el registrado en enero en las Altas Cumbres donde, en una curva, chocaron dos vehículos de frente. En uno de los autos, donde manejaba una mujer mayor y quien habría perdido el control del volante al girar, fallecieron tres personas. En el otro coche iba una pareja con su hijito. Falleció la mujer. Su esposo y el nene sobrevivieron.
Desde el hospital adonde fue llevado en las primeras horas tras la tragedia, el muchacho escribiría y divulgaría un sentido mensaje a la sociedad: “Prudencia al manejar. No vayamos matando amores”.
Otro siniestro fatídico fue el registrado a comienzos de marzo en la ruta nacional 9 norte, a la altura de Simbolar, donde una colisión frontal entre un auto y un colectivo dejó un saldo de tres muertos y varios heridos. Sucedió de madrugada en un tramo de doble línea amarilla.
En esta primera parte del año hubo otros siniestros con dos fallecidos, como uno registrado en Ausonia.

Contra animales sueltos
Además de las colisiones entre vehículos, este año ya se han registrado dos graves episodios fatales en rutas causados por animales que estaban sueltos.
Por un lado, un hombre murió y otros dos resultaron heridos a fines de marzo en la ruta provincial 2, a la altura de la localidad de Ana Zumarán, luego de chocar con el auto contra una vaca. Hay una investigación judicial para determinar cómo fue que sucedió todo y a quién pertenecía el animal, entre otros puntos.
En febrero, una mujer murió luego de que el auto en el que circulaba chocara contra un caballo suelto en la ruta nacional 9 norte a la altura de la localidad de Colonia Caroya, en el departamento Colón. También hay una compleja causa abierta.
Mayoría, motociclistas
Al analizar, quiénes vienen siendo las víctimas fatales del año por choques surge una leve mayoría de motociclistas: en el primer trimestre ya hubo 35 víctimas fatales.
En su gran mayoría, eran varones de entre los 20 y los 30 años.
Estos dramas sucedieron tanto en ámbitos urbanos como en rutas. En la mayoría de los casos, las tragedias fueron colisiones contra otros rodados. En la minoría, caídas de motos o choques contra objetos fijos.
No está confirmado si los motociclistas llevaban casco puesto.
Gran parte de los casos ocurrió de noche y de madrugada.
Vale apuntar que, del total de tragedias viales, la tercera parte sucedió en horas de la madrugada.
Impactos de autos y camionetas
En tanto, al menos 33 personas murieron durante el primer trimestre en el marco de choques entre vehículos y vuelcos protagonizados por vehículos de cuatro ruedas, de acuerdo al registro de La Voz.
En su gran mayoría, eran autos.
Por lo general, las tragedias fueron colisiones frontales y por alcance contra otros autos en su mayoría, aunque también contra camiones y camionetas.
En este sentido, desde hace tiempo viene registrándose una preocupante situación: un sostenido aumento en la participación de camionetas en siniestros graves.
La participación de vehículos de cuatro ruedas en choques fatales fue similar a lo largo del trimestre en Córdoba: 11 muertos en enero, 10 en febrero y 12 en marzo.
A todo esto, en abril ya hubo tres automovilistas muertos por chocar.
Las víctimas más endebles
Por otra parte, en este primer trimestre de 2025 ya han muerto un ciclista y tres peatones en distintos episodios viales. Se trata de las víctimas más endebles de cualquier ecosistema vial.
Estas cuatro muertes se registraron en impactos con autos.
En abril, a todo esto, falleció otro ciclista. La víctima fue un adolescente atropellado, por causas por determinar, por un colectivo del transporte urbano en una esquina del barrio Cofico.
Varones, por lo general
En el primer trimestre de 2025 volvió a quedar en evidencia la alta participación de varones en tragedias . En los primeros tres meses del año fueron 61 los hombres que murieron por sobre las 17 mujeres que fallecieron. De 12 víctimas fatales lamentablemente no hay datos. En los casos donde murieron mujeres, quien manejaba era un varón.

7 varones y 3 chicas, imputados por la picada fatal
Por su saldo y derivación judicial, una de las tragedias más graves del corriente 2025 en la provincia de Córdoba fue el choque en cadena registrado en febrero pasado en el marco de una picada callejera.
En esa carrera ilegal entre autos y motos, ocurrida en cercanías del aeropuerto internacional Ambrosio Taravella, murió un joven que, según la Justicia, participaba de la carrera.
Además, hubo varios heridos.
A poco más de un mes y medio de aquella desgracia de tránsito, la causa avanza en la fiscalía de instrucción a cargo de Patricia García Ramírez.
En esa causa, hay 10 jóvenes que están imputados por el delito de homicidio culposo agravado y lesiones culposas agravadas: siete son varones y hay tres chicas.
Todos se encuentran en libertad. Aunque los varones, vale señalar, estuvieron varios días presos.
La resolución de la fiscal fue absolutamente novedosa: es que, por un lado, acusa a los varones de haber participado de la carrera y, en paralelo, imputa a tres chicas (acompañantes en los coches) por haber supuestamente incitado y alentado a los varones a correr y acelerar.
“Sus intervenciones en el evento constituyeron un apoyo moral y alentador para que el hecho se lleve a cabo en la forma que se cometió”, se señaló en un comunicado.
Por otro lado, la fiscala García Ramírez remitió los antecedentes del caso al fuero Anticorrupción para que se investigue la probable comisión del delito de omisión de los deberes de funcionario público “por parte de los encargados de la fiscalización y control de la seguridad vial”.
Entiende la fiscal que, de existir ese delito, dicha omisión trasciende el hecho concreto ocurrido el 20 de febrero, siendo una conducta sistemática que pone en riesgo a toda la sociedad y en cualquier lugar de la ciudad y de la provincia de Córdoba.
Picadas habituales
Todo sucedió en la madrugada del 20 de febrero pasado en el marco de una de las habituales picadas callejeras que se realizan en Córdoba.
De hecho, en la zona del aeropuerto se realizan desde hace al menos do décadas. Tanto así eran habituales que se las anunciaba en redes sociales de fanáticos de esta actividad.
Aquella madrugada, se produjo una colisión en cadena que provocó la muerte de Facundo Fabián Donat, quien tenía 19 años.
En el marco de la causa, la fiscal imputó a: Fabio Gabriel Albarracín (24), Facundo Carlos Veizaga (23), Maximiliano Pérez (23), Enzo Pfister (25), Matías Albarracín (20), Jerónimo Maldonado (20) y Juan Ignacio Guerrero (23). Todos fueron imputados por homicidio culposo agravado, lesiones culposas agravadas y participación ilegal en prueba de velocidad, según la fiscal.
En paralelo, acusó a Virginia Aldana Orellana (20) y Luz Ángela Godoy (19) y una chica de 15 años por homicidio culposo agravado en calidad de partícipes necesarias. En el caso de la menor, su caso fue girado al fuero competente.
Todos fueron indagados y se encuentran en libertad.
Por otro lado, la fiscala rechazó la intervención como querellante particular solicitada por los padres del fallecido, por considerar que no se dan las condiciones de admisibilidad en virtud de que el mismo habría tenido intervención en el hecho.