Los terribles detalles del crimen que conmocionó a la localidad de San Vicente, Misiones, continúan saliendo a la luz a medida que pasan los días. El cuerpo sin vida de un hombre de 48 años fue hallado en una zona rural y presentaba una terrible particularidad: le faltaban los ojos.
Ahora, la madre del único detenido por el hecho reveló qué le contó su hijo cuando volvió a su casa: “Me dijo que había matado al diablo”.
Misiones: qué dijo la mamá del acusado de asesinar y mutilar a un hombre
Conforme pasan los días, la investigación continúa su curso y se van conociendo más detalles escabrosos.
La madre del acusado contó al medio local Primera Edición: “Llegó a la casa con ambos ojos en la mano y dijo que mató al diablo”.

Tras esto, la mujer le contó a la Policía el lugar en el que su hijo había escondido los globos oculares de la víctima. Fueron secuestrados por la Policía y llevados a la Morgue Judicial.
Por ahora, restan los resultados de la autopsia, aunque los investigadores intentan establecer si las mutilaciones ocurrieron mientras la víctima estaba con vida o si fue una vez fallecido.
Conmoción por un terrible crimen en Misiones
Un macabro asesinato conmociona a la provincia de Misiones tras el hallazgo del cuerpo de un hombre de 48 años, identificado como Luis Salvador Batista Da Silva, quien fue encontrado sin vida en una plantación de yerba mate y té en una zona rural del poblado de San Vicente. La víctima presentaba signos de extrema violencia, incluyendo múltiples heridas y la particularidad de que le habían arrancado los ojos.
El descubrimiento fue realizado el pasado martes por un vecino, quien alertó de inmediato a las autoridades. Al llegar al lugar, efectivos policiales se encontraron con la dantesca escena: el cuerpo de Batista Da Silva estaba semidesnudo, cubierto de barro y con evidentes señales de un brutal ataque.
El informe médico preliminar reveló la crueldad del ataque: Batista Da Silva presentaba excoriaciones en la espalda, heridas cortantes en el rostro, mentón y cavidad bucal, además de contusiones en el cuero cabelludo. La Justicia ordenó una autopsia para determinar el mecanismo exacto de la muerte y confirmar el grado de violencia sufrido por la víctima.

En el marco de la investigación, un joven de 19 años fue identificado como el principal sospechoso del asesinato. Domiciliado en el barrio Tarumá de San Vicente.
Una pista fue clave para dar con él: según testigos, había sido visto compartiendo tragos con la víctima el último domingo.
Lo capturaron en su casa. “Lo tenía que hacer porque era el diablo”, aseguró ante las autoridades en ese momento.