La Cámara Federal de Casación Penal ordenó volver a detener a un joven propietario de un local de indumentaria deportiva procesado por narcomenudeo que había sido puesto en libertad en marzo último. El detenido es considerado “influyente” donde operaba, en la ciudad correntina de Bella Vista, según informaron fuentes judiciales.
Por peligro de fuga, la sala integrada por los jueces Mariano Borinsky, Gustavo Hornos y Carlos Carbajo, dispuso anular un fallo emitido por la Cámara Federal de Apelaciones de Corrientes en marzo y que dejó en libertad a Juan Rodrigo Bruzzo (32), procesado por venta de drogas al menudeo en diversas modalidades y según la investigación, con un local de ropa deportiva como fachada.
El fiscal General de la esfera federal en Corrientes, Carlos Schaefer, fundamentó su pedido de que Bruzzo vuelva a prisión al señalar “la incidencia que tendría” sobre la sociedad de la ciudad de Bella Vista, “teniendo especialmente en cuenta las constantes y repetidas denuncias de vecinos del lugar que lo identifican como miembro influyente de la localidad y uno sus mayores “transas”, según indica la resolución.
El acusado había sido detenido el 7 de diciembre de 2021 al presentarse a declarar en sede judicial, luego de que fuera requerido en dos oportunidades durante noviembre de ese año y no asistiera.
Al respecto, el fiscal indicó que "se encontraba oculto en un hotel de Bella Vista, en presunta connivencia con el dueño del lugar, quien le advertía sobre los movimientos que había en el hotel, con su pareja y otro colaborador".
Y aseguró que, dado ese contexto y otras circunstancias, como la comprobación de que alternaba en un departamento y otros dos domicilios, "la pena que eventualmente podría aplicársele a Bruzzo supera los ocho años e impide condena de ejecución condicional".
Bruzzo, propietario de un local de venta de indumentaria deportiva en Corrientes, era investigado en Bella Vista por la Justicia Federal de Goya, desde agosto de 2019, luego de una serie de denuncias que habilitaron a la intervención de su teléfono.
“Se debe atender al hecho de que el imputado habría empleado un negocio comercial -en principio de su propiedad-, para la operatoria vinculada a la venta de estupefacientes -cocaína y marihuana-, más concretamente, en su modalidad conocida como “narcomenudeo” y en sus distintas formas, esto es, “pasamano” y “delivery”, para lo cual utilizaría, en este último caso, una motocicleta de la que sería titular”, indica el fallo de la Cámara de Casación.
