24 días después del hallazgo del cuerpo de Joaquín Sperani (14) en Laboulaye, L. –el compañero de colegio que está demorado en el Centro de Admisión y Diagnóstico (CAD), en Complejo Esperanza– pudo exponer el miércoles por teleconferencia ante el Juzgado de Control, Faltas, Niñez, Juventud, Penal Juvenil, Violencia Familiar y de Género de la ciudad cabecera del departamento Presidente Roque Sáenz Peña.
El tribunal que investiga el brutal crimen explicó a La Voz que L., por ser menor de edad, no “declara”, sino que hace una “exposición informativa” con todas las garantías procesales.
“Al ser no punible, no es una declaración indagatoria”, precisaron. La reunión virtual estuvo presidida por el juez Sebastián Moro; el abogado defensor de L., el letrado Raúl Palacios; la defensora pública, Mariana Ferreyra, y la secretaria del juez.
En ese contexto, se le explicó al adolescente en qué consiste el acto, se le leyó el hecho que se le atribuye y su calificación legal. Se le explicó la prueba que se recabó y finalmente se lo invitó a exponer su versión.
“Todo fue con la asistencia de su defensa, que previamente había hablado con él”, detallaron desde el tribunal.
Según trascendió, L. admitió una discusión con Joaquín y que le pegó con un fierro desde atrás.
Toda la exposición informativa duró 30 minutos. Luego, tuvo un breve contacto con sus padres.
Cómo sigue la investigación por el crimen de Joaquín
“No hay nada que haya cambiado el rumbo de la investigación”. Con ese textual, el tribunal detalló a este medio que la causa continúa abierta y se siguen produciendo pruebas.
“Faltan incorporar pruebas a través de distintos gabinetes de la Policía Judicial”, precisaron las fuentes consultadas.
En tanto, Mariela Flores y Martín Sperani, los padres de Joaquín, siguen acercando pruebas al juzgado por medio de su abogado, Raúl Frencia.
“Lo que se acerca al tribunal ya se ha investigado o se está produciendo”, describieron.
La Secretaría de Niñez Adolescencia y Familia (Senaf) emitió un informe sobre L., en el que explica que tiene dificultades para reconocer el daño y el déficit en el control de los impulsos.
Morir a los 14: el crimen de Joaquín conmueve a todo un país
De acuerdo con lo que consta en la causa judicial, Joaquín desapareció el jueves 29 de junio cuando llegó a la escuela Ipem Nº 278 Malvinas Argentinas, dejó la bicicleta en el patio del colegio y se retiró sin ingresar a clases.
Ese jueves, después de las 16, se perdió todo rastro del muchacho. Las cámaras de seguridad de la zona analizadas muestran el momento en que el chico camina por la vereda, a metros de su escuela, acompañado por L., su amigo y compañero de colegio, quien hoy está demorado y sospechado de ser el autor del crimen, luego de que el domingo dijo ante las autoridades policiales y judiciales, según trascendió, que él “lo había matado”.
Ese 29 de junio, los padres de Joaquín se alarmaron al no tener noticias suyas después de clases y radicaron una denuncia en la Unidad Departamental de Laboulaye que dio origen a la búsqueda.
Finalmente, el domingo el cuerpo del adolescente fue hallado por vecinos en una vivienda abandonada ubicada a poco más de 100 metros del colegio, tras lo cual fue detenido el amigo de Joaquín, quien no puede ser imputado por el crimen debido a que tiene 14 años y no es punible de acuerdo con las leyes vigentes en Argentina.
La autopsia determinó que el chico tenía múltiples golpes en la cabeza que le ocasionaron un traumatismo de cráneo y daño encefálico que derivó en su muerte.
