Un joven que, al comando de una camioneta 4x4 robada, chocó a varios automovilistas y terminó matando a un motociclista en el marco de un frenético y temerario andar por calles de barrio General Bustos de Córdoba Capital, puede llegar a ser condenado por la grave figura de homicidio simple por dolo eventual.
Se trata de Franco Nicolás Cabrera Guevara (20), quien se encuentra detenido en la Cárcel de Bouwer. La víctima de esta historia fue Gonzalo Uliana, quien tenía 29 años.
En el juicio que se desarrolla en la Cámara 1ª del Crimen de Córdoba, el fiscal Gustavo Arocena reclamó una pena de 8 años de cárcel efectiva por homicidio por dolo eventual. La misma figura sostuvo la parte querellante, a cargo del abogado Carlos Nayi, quien fue más allá y reclamó 10 años de cárcel contra Cabrera Guevara.
La defensora Belén Barbano solicitó que el caso se encuadre en un homicidio culposo y pidió 3 años de cárcel condicional.
La audiencia se realizó el pasado viernes antes de que arrancara la feria judicial. Se abrió un cuarto intermedio hasta el próximo 22 de febrero, cuando se dicte sentencia.
De haber condena por dolo eventual, se trataría del segundo automovilista que es sentenciado con esa seria figura penal en Córdoba.
El primer caso fue Alan Amoedo, quien en 2022 fue sentenciado a 9 años de cárcel por homicidio por dolo eventual tras ser hallado culpable de la tragedia de la Circunvalación. Amoedo, quien manejaba ebrio, con cocaína encima y a alta velocidad, chocó con su auto en la banquina a dos coches y provocó un desastre. Fallecieron dos personas y una tercera sufrió graves secuelas.
Esta sentencia de la Cámara 9ª del Crimen fue ratificada en 2023 por el Tribunal Superior de Justicia.
De esta manera, la máxima instancia judicial de Córdoba sentó jurisprudencia para los demás casos de siniestros viales.
Hasta el caso Amoedo, todos los juicios venían siendo encuadrados y condenados como meros homicidios culposos. Esta mirada legal cosechó numerosas críticas todos estos años por parte de familias de las víctimas.
El homicidio culposo gira en torno a la imprudencia y la negligencia y prevé una pena de entre 3 y 6 años de cárcel, que puede o no ser efectiva.
El dolo eventual va más allá: una persona maneja fuerte y de manera temeraria y se representa mentalmente que, manejando así, puede causar una muerte. Sigue adelante y la provoca. ¿Quiso matar intencionalmente? No. Pero debería haberse representado ese punto. De allí, esa eventualidad.
La pena va de 8 a 25 años.
Me seguía el diablo
El siniestro vial bajo análisis sucedió el 8 de marzo de 2022. Aquella tarde, Federico Cabrera Guevara sustrajo una 4x4 del taller de su padre y comenzó a circular de manera temeraria por barrio General Bustos. Para robar el vehículo, esperó que su padre no estuviera. Además sabía dónde estaba la llave. En su derrotero, iba tocando bocina y circulaba a altísima velocidad.
Esos puntos serían cruciales para la fiscalía de instrucción a cargo de Andrés Godoy a la hora de encuadrar todo como dolo eventual.
Como se dijo, en su accionar, el joven chocó varios autos y hasta una moto, cuyo conductor, Gonzalo Uliana, murió en el lugar.
Tras causar la tragedia vial, el conductor fue bajado de la 4x4 por varios vecinos. Al ser detenido, no paraba de gritar que lo perseguía el diablo.
Su familia dijo que era adicto a drogas y que padecía esquizofrenia y otros trastornos psicológicos.
Desde aquel momento, Cabrera Guevara permanece preso.
El fiscal Godoy ordenó una serie de peritajes psicológicos y determinó que el joven había sido completamente consciente de sus actos y lo declaró imputable. Tanto así que desechó que se haya tratado de un homicidio culposo y lo imputó por dolo eventual.
Esa discusión penal se trasladó al juicio que arrancó en la Cámara 1ª.
En las audiencias declararon como testigos peritos en salud mental que señalaron que el joven tenía “disminuida su capacidad de comprensión”.
Tras analizar esos testimonios tanto la fiscalía como la querella entendieron que el joven, si bien es adicto y padece esquizofrenia, comprendía la criminalidad de sus actos y pidieron condenas por dolo eventual.
Pedido de perdón
Ya en el juicio, Franco Nicolás Cabrera Guevara (20) pidió perdón cuando se le concedió la palabra. Luego, se llamó a silencio y no efectuó ninguna otra consideración. El muchacho permanece en la Cárcel de Bouwer.
Pedido de investigación
Además de reclamar 10 años de cárcel, Nayi solicitó en su alegato que se giren los antecedentes a la fiscalía de turno para que se investigue por qué y de qué manera la Municipalidad de Córdoba le otorgó a Cabrera Guevara el carné para manejar motos, teniendo en cuenta sus padecimientos psiquiátricos.
El juicio termina en febrero.
