Tal como se temía, al caer la tarde del miércoles un cadáver fue encontrado enterrado en el patio de una vivienda de barrio Zumarán, en la zona norte de la ciudad de Córdoba.
El cuerpo, que estaba envuelto en bolsas, fue retirado por efectivos del grupo Duar de la Dirección Bomberos de la Policía de Córdoba. Policía Judicial lo trasladó a la morgue.
Los estudios forenses deberán determinar quién fue la víctima y cómo fue asesinada. El cuerpo estaba en avanzado estado de descomposición.
La pareja que residía en la casa quedó detenida.
Policías, funcionarios judiciales y vecinos sospechan que la víctima de esta historia es una mujer de 35 años, madre de tres nenas, que vivía en Zumarán y que desapareció a fines de enero de 2022.
Mientras el espanto fue desenterrado en el patio, la morada fue escenario de un minucioso registro por parte de los investigadores que llevaron adelante un allanamiento judicial.Todo se descubrió en las últimas horas cuando una patrulla llegó al domicilio de calle Gaboto al 2000, en Zumarán, por un llamado al 911 sobre una pelea de una pareja.
Al llegar, los uniformados entrevistaron a una mujer y a su novio. Ella tiene 43 años; él 30.
Según trascendió, la mujer le dijo a los policías, en medio de un ataque de furia, que su novio había matado a una mujer meses atrás “porque había entrado a robar a la casa”. Incluso, dijo que la había enterrado en el patio.
El hombre, a su vez, habría dicho a los policías que ambos habían participado en eso; aunque esta versión debe ser constatada por la justicia.
Lo concreto es que los policías llamaron a sus jefes y la zona fue acordonada.
Recién pasada la siesta, se autorizó el allanamiento a la morada.
Un perro adiestrado “marcó el lugar” y los bomberos del Duar comenzaron a trabajar en el patio para dar con el cuerpo de la víctima.
Consternación en la barriada
En Zumarán, a todo esto, crece la conmoción y todos afirman que la mujer enterrada era vecina de allí. Se sospecha que es una mujer, madre de 3 niñas, que había desaparecido a fines de 2022.
Compleja investigación tiene ahora en sus manos la fiscalía: saber quién es la víctima, determinar qué le pasó y establecer las responsabilidades penales.
Mientras tanto, una nueva historia de espanto sacude a Córdoba.
