Mientras en la localidad de Alcira Gigena, en el departamento Río Cuarto, no cesa la conmoción por el crimen de Omar Rivarola (70), la Justicia y la Policía trabajan para esclarecer el crimen y dar con quien o quienes estuvieron detrás del caso. La principal hipótesis es que el jubilado fue asesinado con al menos un fuerte golpe en la cabeza en medio de un ataque cometido por personas que buscaban elementos de valor, presuntamente dinero.
En ese marco, las miradas investigativas están centradas en determinar todas las personas allegadas a la víctima y que solían ir a su domicilio. La intención es ahondar en quiénes, aprovechando esa confianza y ese vínculo, podrían haberlo atacado.
Por ahora, no hay detenidos ni imputados en torno a este crimen.
La causa se encuentra en manos del fiscal Daniel Miralles, de Río Cuarto, quien trabaja con pesquisas policiales que toman testimonios, analizan filmaciones y recaban distintas pruebas. Ya hubo un procedimiento en un domicilio de Gigena, del que no trascendieron los resultados oficialmente.
Con el asesinato del jubilado, a todo esto, ya suman 63 los crímenes ocurridos en la provincia de Córdoba en lo que va del corriente año, según cifras oficiales a las que La Voz tuvo acceso.
La mayoría de los homicidios en la provincia vienen encuadrados en episodios de violencia urbana: peleas y venganzas muchas veces entre personas conocidas entre sí. La violencia urbana es aquel fenómeno que engloba la resolución de conflictos interpersonales de la peor manera. Muchas veces, la droga tiene relación directa de estos casos ya sea como generador de los ataques o bien porque los agresores se encontraban bajo efectos de sustancias, según reconocen fuentes judiciales y policiales.
La inseguridad, en tanto, aparece como la segunda causa de muerte violenta en la provincia, al tiempo que la violencia de género y familiar se ubican como la tercera.
Al analizar la situación en general de los homicidios, surge que se viene registrando un leve pero sostenido incremento en la cantidad de muertes violentas en la provincia de Córdoba en los últimos años.
Según registros oficiales, en 2024 se cometieron 117 homicidios en toda la provincia, al tiempo que en 2023 fueron 116 los homicidios, mientras que en 2022 y en 2021 hubo 99 y 90, respectivamente, según informes oficiales de las autoridades.
De todos modos, son cifras relativamente similares y no hay saltos abruptos en las cantidades.
Desde la Provincia remarcan que, al analizar de manera parcial, la cantidad de homicidios de este año viene siendo menor a la de idéntico período de 2024.
En 2025, la tasa de homicidios viene siendo de 1,55 cada 100 mil habitantes.
Se trata de una cifra baja en comparación con otras provincias de la Argentina.
En 2024, la tasa de homicidios en el país durante 2024 fue de 3,8 por cada 100 mil habitantes. En este sentido, Santa Fe tuvo la mayor tasa de homicidios con 4,64 cada 100 mil habitantes.
A la par de los homicidios, por cierto, no deja de registrarse una preocupante secuencia de peleas o “ajustes” que vienen dejando heridos, en muchos casos por armas de fuego.

¿Crimen a traición?
Volviendo al homicidio del jubilado Rivarola, ocurrido en Alcira Gigena, la sospecha es que, tal como ya ha sucedido en numerosos episodios en los últimos tiempos en Córdoba, se habría tratado de un ataque a traición, según la sospecha.
La suposición de los pesquisas es que el hombre le habría franqueado el ingreso a una persona (o varias) de su confianza. Ya en el interior del domicilio, sobrevino el robo.
Todo fue descubierto el pasado lunes a las 16 cuando sobrinos del hombre, preocupados por la falta de noticias, llegaron a la vivienda de calle Héroes Anónimos 825. Tras ingresar al inmueble, por el patio trasero, hallaron al hombre muerto en el suelo. Presentaba golpes en la cabeza, según fuentes del caso.
La casa se encontraba con mucho desorden, según confirmaría el propio fiscal. El típico desorden que dejan las personas que buscan algo para llevarse.
Llamativamente, se hallaron dos celulares en la casa, según precisó el fiscal Miralles. El funcionario remarcó que se trataba de una escena violenta, había desorden en la vivienda y el hombre presentaba golpes en la cabeza. De todos modos, espera los resultados forenses definitivos.
Don Omar habría sido atacado en la madrugada del domingo. Fue luego de volver de una reunión con otras personas.