Luego de un primer intento fallido por corte de luz en la manzana de la casona del Tribunal Oral Federal 2 (TOF2) de Córdoba, este viernes se realizó la esperada audiencia de visu del juicio abreviado a los 13 acusados imputados en el “narcoescándalo” de Río Cuarto.
Tras un fallido intento en diciembre, el fiscal federal Carlos Gonella volvió a presentar el acuerdo que como acusador había entablado con las defensas de los acusados para que reconocieran su culpabilidad y se les rebajaran penas.
A comienzos de diciembre el vocal Carlos Lascano había rechazado similar acuerdo y derivó el expediente a sus pares del TOF2 para que decidan el camino a seguir. Ahora, se constituyó el nuevo tribunal con María Noel Costa, José Fabián Asís y Julián Falcucci (este del TOF1).
La audiencia de visu de este viernes se realizó para presentar la propuesta y escuchar a los acusados que manifestaron su conformidad con el acuerdo.
Discrepancia en la calificación legal
Lascano manifestó sus discrepancias con la calificación legal y consideró la necesidad de “un mejor conocimiento de los hechos ilícitos que se le endilgan a los imputados, lo que implica consecuentemente la necesidad de la realización del juicio, donde el Tribunal recepte las pruebas y las partes puedan alegar”, según trascendió en aquel momento.
Pero en esta ocasión, Gonella presentó la propuesta e indicó que Lascano rechazó su acuerdo sin argumentar las dos causales que prevé la ley para estas situaciones: no estar de acuerdo con la calificación legal o entender que necesita una mejor valoración de la prueba para que se entre a un juicio abierto.
Trascendió que el juez entendía que debía agregarse el delito de transporte de estupefacientes, pero también se señala que eso no está en la plataforma fáctica de la acusación.
En el acuerdo no se tiene en cuenta la cuestión de la reincidencia de los acusados, algo que sobrevuela la posibilidad de que los jueces acuerden o no con el abreviado.
Sabido es que los magistrados no pueden fallar con mayor gravedad a lo que acordaron las partes (o acusó el fiscal). Queda pendiente saber con qué ojos mirarán los jueces la propuesta de partes y qué mirada tendrán con relación a la reincidencia.
El entendimiento de defensores y acusador contiene además el decomiso de valiosos bienes obtenidos por los acusados.
La causa del narcoescándalo inició en 2014
La investigación del narcolavado en Río Cuarto se inició en 2014. Pero se aceleró en 2019, tras el asesinato del llamado “zar de la droga”, Claudio Torres, acribillado a balazos en la puerta de su casa, en barrio Fénix.
Entonces, el juez riocuartense Carlos Ochoa dispuso un centenar de allanamientos simultáneos. Secuestró autos, bienes suntuarios y ordenó la detención de los presuntos cómplices de Torres, entre los que figura un jefe policial.
En 2021, Mariano Rivarola, Andrés Rivarola, Gabriel Bossi y Cristian Ortiz llegaron a juicio en calidad de presuntos coautores del delito de organización y financiamiento de narcolavado.
En tanto, Cristian Berti, Franco Soffli, Jorge Etcharren, Mariano Peirano, Marcelino Mansilla, Luz Montoya, María López de Bravo, Rodrigo Marcial Villar Benítez y Gustavo Osvaldo Oyarzabal (ex jefe de la División Investigaciones de la Departamental de Policía) fueron procesados como cómplices primarios.
