Seis vehículos protagonizaron un choque en cadena en el kilómetro 3 de la avenida de Circunvalación. El hecho ocurrió el viernes a la tarde, en las inmediaciones del puesto de control que la Policía Caminera tiene en el arco vial, a la altura de barrio Patricios Oeste.
El accidente generó un embotellamiento de varios kilómetros de longitud, complicando el tránsito en Circunvalación y en los cruces con las rutas que van a Colonia Tirolesa y a El Gateado, en el sector nordeste de la capital provincial.
Según algunos de los conductores damnificados, el incidente se produjo cerca de las 17.30, cuando la Circunvalación se encontraba con tránsito congestionado como habitualmente ocurre los viernes por la tarde, y los vehículos disminuían su marcha a la altura del control de la Policía Caminera.
A pesar de que la visibilidad era óptima, una camioneta marca RAM color negra, llegó con velocidad excesiva a las inmediaciones del control y no alcanzó a frenar, por lo que chocó a otros cinco vehículos que se encontraban en su carril y habían disminuido la marcha.
La camioneta era conducida por un hombre de unos 62 años, quien trascendió que sería un empresario oriundo de la localidad de Río Segundo, quien utilizaba esa ruta habitualmente. Allegados al conductor que se encontraban en el lugar, afirmaron que el conductor utilizaba esa ruta habitualmente, “casi a diario”, por razones de negocios. “No es de conducir rápido, es muy prudente”, dijo un allegado al hombre que inició la cadena de choques.
El primero en ser impactado fue un Chevrolet corsa color champagne, en el que se trasladaba una pareja. El conductor quedó atrapado en el vehículo y debió ser auxiliado para ser liberado. Gracias a la activación de los airbags, solo sufrió un traumatismo de cráneo leve y un corte en el pómulo y fue trasladado en una ambulancia a un hospital privado, acompañado de su padre que llegó hasta el lugar al enterarse del siniestro. La acompañante resultó ilesa y no quiso hacer comentarios sobre el hecho.
“Menos mal que nadie venía en la parte trasera del auto, porque hubiera resultado aplastado”, comentó otro de los conductores, mientras intercambiaba con otro los datos del seguro en las inmediaciones del siniestro.
Luego de recibir el impacto, el corsa impactó con un Volkswagen gol color gris, este con un Fiat Palio celeste, que chocó a un Citroën C4 negro, el que finalmente le pegó a un remise Chevrolet modelo Meriva del tradicional color verde que caracteriza a esos vehículos de alquiler.
La conductora del remise, que venía con una pasajera, señaló que el control policial está “mal ubicado” y que parte de la responsabilidad es del embotellamiento que genera en esa vía rápida que rodea a la ciudad.
Otros tres conductores fueron atendidos por dos ambulancias que llegaron al lugar por golpes de menor envergadura, en tanto que uno de ellos también fue trasladado posteriormente a un sanatorio privado.
