Dos hombres fueron detenidos y uno más es investigado por la presunta responsabilidad en la venta y la coordinación del narcotráfico a unas pocas cuadras del Centro de la ciudad de Córdoba y de la Terminal.
El objetivo se logró tras un operativo llevado a cabo el pasado jueves que implicó cuatro allanamientos, el secuestro de estupefacientes y la detención de los dos presuntos narcomenudistas, ambos mayores de edad.
Meses atrás, a la Fiscalía de Lucha Contra el Narcotráfico del Tercer Turno había llegado una pista: aparentemente, un hombre había convertido una casilla de villa La Maternidad, en la zona sureste de la ciudad, en un búnker lleno de “empleados” que traficaban cocaína y marihuana para él.
La casilla queda ubicada en un rincón de difícil acceso, al que se llega bordeando el pasaje Maimará desde la calle Agustín Garzón al 1400.
Hasta allí había llegado un hombre que era apodado “El Hueso”, quien en poco tiempo se habría posicionado como el “mandamás” en los menesteres del narcomenudeo en esta zona de la capital.
Cuando estos indicios tocaron las puertas grandes de las oficinas de antinarcóticos en Córdoba, los investigadores comenzaron a librar una serie de diligencias para corroborar la veracidad de los hechos.
Al poco tiempo se encontraron con una llamativa sucesión de hechos delictivos que derivaron en un urgente dispositivo, a tan solo cuatro meses más tarde del comienzo de las investigaciones.
Allanamientos por drogas a metros del Centro de la ciudad de Córdoba
Desde la fiscalía se cursaron órdenes contra cuatro domicilios ubicados en pasaje Maimara, pasaje Eugenia Garro y calle Agustín Garzón al 1400. A través de estos operativos, dieron con el punto de venta que manejaba “El Hueso”, a unos 200 metros de un centro educativo y a una cuadra de la ex Maternidad Provincial.
Con 30 años de edad, el hombre habría ganado fuerza en su actividad delictiva durante los últimos años. Los pesquisas se habrían encontrado con un verdadero “capo” que manejaba a “un grupo de perros”, tal como se le denomina en la jerga del hampa a quienes trabajan para un patrón del narcotráfico.
Hay versiones que hablan de la perversidad con la que se manejaba “El Hueso”: “Buscaba a las personas más desprotegidas, por ejemplo, a las mujeres que llegaban a la ex Maternidad a realizar un trámite, o a la población sin techo, para reclutarlos y vincularlos a la venta de drogas”, dijeron fuentes allegadas a la investigación.
Si bien desde la fiscalía aún no se pudo corroborar esta presunción, sí causó sorpresa que no exista un tipo de filiación entre las personas que habrían trabajado para “El Hueso”.
Por otra parte, fue detenido otro hombre de 49 años por presunta participación en la venta de sustancias ilícitas en la zona.
También se hallaron indicios sobre el posible involucramiento del hermano de “El Hueso” en la banda. En este caso, se trata de un hombre de unos 37 años de edad que, según pudo saber La Voz, sería responsable de delitos por la privación ilegítima de la libertad contra las personas.
En los domicilios, además del cierre del punto de expendio de drogas, investigadores de la Fuerza Provincial Antinarcóticos (FPA) lograron el secuestro de varias dosis de cocaína, marihuana y dinero, entre otros elementos presuntamente relacionados al fraccionamiento y comercialización de sustancias ilícitas.
