Los jugadores de la selección francesa de rugby acusados de abuso sexual viajarán por la noche del martes a su país. Mientras se resuelve el pedido de sobreseimiento que presentaron los abogados defensores, los jóvenes continuarán imputados.
Los imputados Hugo Araudou y Oscar Jegou abordarán la aerolínea Air France gracias a la habilitación recibida por una resolución de la Justicia. El vuelo partirá cerca de la medianoche hasta el aeropuerto Charles De Gaulle de París.
De acuerdo a lo informado por el medio Clarín, el permiso quedó formalizado tras una audiencia el mediodía del martes en el Polo Judicial Penal a cargo de la jueza de Garantías, Eleonora Arenas.
En cuanto al proceso judicial, se desestimó la posibilidad de ampliar la pericia psicológica de los jugadores, quienes enfrentan una pena de entre 8 y 20 años de prisión. Por su parte, la querella no presentó oposición a la habilitación.
El Fiscal Adjunto en lo Penal avaló la salida reuniendo las condiciones de comparecer al consulado argentino cada vez que lo requiera la Justicia, fijar un domicilio legal y virtual, donde ubicarlos, y comparecer en caso de tener que venir a Mendoza.
“Ya tienen tanto su pasaporte como el teléfono celular. Están en Argentina y en libertad, viviendo en Buenos Aires. Pero si se puede hoy mismo los llevamos a Ezeiza”, declaró en diálogo con el mismo medio el abogado Rafael Cúneo Libarona.
“Tenemos que superar algunos escollos de burocracia de la Justicia de Mendoza. Faltan que un juez de turno dé la orden. Ya mandé a sacar los tickets, hay un 80% de chances de que podamos salir hoy mismo de Ezeiza”, sostuvo la defensa.
El traslado a Buenos Aires
Se trataría del segundo permiso de traslado de los imputados, Auradou y Jegoú, ya que a fines del mes de agosto viajaron hasta Buenos Aires desde Mendoza, donde residieron 48 días.
Según TN, alrededor de la mitad de ese periodo los imputados habrían estado detenidos “con prisión domiciliaria y tobillera electrónica acompañados por sus familiares”.
Pablo Hnatow, abogado de los jóvenes, justificó este anterior movimiento en “la difusión de sus fotografías” que sus clientes padecían en Mendoza y que les habría impedido “hacer una vida normal”.
El caso en la Justicia: la defensa denunció “intereses políticos” ante la evidencia de la fiscalía
Previamente en la causa, la Justicia solicitó la pericia psicológica de la denunciante. A fines de agosto, mientras la mujer se ausentaba a las audiencias, la defensa de los imputados solicitó formalmente el sobreseimiento de sus clientes.
La fiscalía habría interpretado estas ausencias como estrategia para dilatar el proceso, de acuerdo con lo señalado La Nación. A esta falta de la denunciante, se le sumó la aparición de una conversación entre la mujer y una amiga el día después del hecho en el hotel. En la misma, la denunciante expresó su satisfacción por la noche que pasó con los deportistas.
En la información más reciente, la Justicia desestimó el pedido de recusación que los abogados de la defensa presentaron contra los fiscales Darío Nora y la jefa de Fiscales, Daniela Chaler.
Según Clarín, los defensores, Natacha Romano y Mauricio Cardello, argumentaron que la fiscalía perdió “objetividad para intervenir este caso”.
Los abogados acusaron a los fiscales de actuar “bajo influencias políticas” e incurrir en violencia moral y falta de objetividad por cambiar de posición desde que inició el proceso judicial.
Como marco, uno de los abogados de los jugadores es Rafael Cúneo Libarona, hermano del ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona.
El Fiscal Adjunto en lo Penal, Gonzalo Nazar, marcó las inconsistencias entre la presunta prueba y lo declarado por la denunciante en una primera instancia.
Cabe recordar que todo sucedió el pasado 6 de julio, luego de un partido entre Los Pumas y la selección francesa de rugby. La mujer denunció a ambos jóvenes por abuso sexual con acceso carnal agravado.
