Tras más de 10 horas de deliberaciones y una discusión que tensó los ánimos en los pasillos y la explanada de los Tribunales de Cruz del Eje, los jurados populares y los jueces se expidieron y dieron su veredicto en el juicio por el crimen de Joaquín Paredes, ocurrido el 25 de octubre de 2020 en la pequeña localidad de Paso Viejo, en el noroeste provincial.
En sentencia unánime, el jurado popular declaró culpable al agente Maykel Mercedes López, quien deberá afrontar una condena de prisión perpetua por ser considerado autor penalmente responsable del hecho homicidio calificado agravado por el uso de arma de fuego y por su condición de efectivo policial.
Asimismo, también por unanimidad, se absolvió a otros cuatro policías que intervinieron en la redada que terminó con la muerte de Joaquín y heridas a otro adolescente que recibió un balazo en un brazo. Se trata de Iván Luna, Enzo Alvarado, Jorge Ricardo García y Ronald Fernández Aliendro quienes llegaron al juicio en libertad.
A su vez, un sexto policía que era juzgado por amenazas fue absuelto.
La fiscal de Cámara, Fabiana Pochettino, y los abogados de la parte querellante, Claudio Orosz, Ramiro Fresneda y Juan Pedro García, habían solicitado la pena de prisión perpetua para los cinco policías involucrados en la violenta redada policial.
En tanto, los abogados defensores habían solicitado la absolución de sus representados.
El fallo causó bronca y desazón entre los familiares de la víctima. “Hubo justicia a medias. Si bien el asesino de mi hijo recibió perpetua, yo esperaba esa pena para todos”, expresó Soledad, madre de Joaquín.
No está claro si la fiscalía apelará la sentencia del tribunal. Los representantes de la querella irán en casación.
“Una vez que leamos la sentencia, vamos a presentar un recurso de casación en lo que se refiere a la acusación de los cuatro policías restantes como participes necesarios del hecho. No podemos hablar demasiado porque no sabemos los fundamentos”, expresó Claudio Orosz, abogado querellante representante de la familia de Joaquín Paredes.
“Esperábamos una condena más poderosa y que se declarara esto como violencia institucional y vamos a reclamar ante el Tribunal Superior de Justicia y la Corte Suprema”, indicó el letrado.
“Si había elementos suficientes para condenar a López, había elementos para condenar a Luna”, expresó y afirmó: “Vamos a leer los fundamentos del tribunal, pero estamos convencidos que el hecho no hubiera ocurrido si los otros tres policías no estaban en el lugar y que Luna disparó en la misma dirección y tiene que ser condenado como coautor”, expresó el letrado en diálogo con La Voz.
Por su parte, Pedro Despouy Santoro, abogado de tres de los policías que resultaron absueltos, aseveró que “es importante resaltar la decisión unánime”.
“Tiene extrema legitimidad porque es el pueblo el que lo ha dicho por eso tiene especial valor. Los jurados populares han visto la injusticia de la acusación y la rebeldía de la fiscal de apartarse de un planteo de un tribunal superior”, dijo y agregó: “Estamos satisfechos porque hubo justicia”.
La última jornada del juicio estuvo llena de emociones en la sala de audiencias y en el recinto “espejo” donde los familiares de Joaquín compartieron espacio con los de los policías imputados.
Por la mañana, hubo unos minutos para que las partes involucradas tuvieron la oportunidad de decir sus últimas palabras.
Fue el único momento del juicio en el que habló el principal acusado, Maykel López, quien pidió perdón a la familia de Joaquín por el desenlace del accionar policial en Paso Viejo.
“Ante todo, a la familia de Joaquín quiero pedirle perdón por todo lo que pasó y decirles que la verdad de lo que pasó esa noche se los dijo mi abogado. No se imaginan lo que pasó por mi cabeza esa noche. Lo que sentí y el dolor que pasé esa noche lo voy a llevar por el resto de mi vida”, dijo el agente policial.
En uso del derecho de sus últimas palabras al jurado, Soledad Paredes, madre del adolescente, señaló: “Les pido que se pongan en mi lugar y se pongan en el lugar de madre, que aunque sea por un ratito piensen en que Joaquín podría ser su hijo, su nieto, su sobrino”, expresó la mujer que solicitó que a los acusados sean condenados a prisión perpetua. “Ellos tienen hijos, van a abrazar a sus hijos y yo al mío no lo voy a poder abrazar más”, agregó.
Luego de las 10 comenzó una espera que se hizo eterna y que terminó recién pasas las 19.30 con la lectura de la sentencia que también se hizo en “lenguaje simple” para que todos pudieran entender lo que planteaba.
Los familiares de Joaquín Paredes esperaban una condena más dura para los cuatro policías que actuaron junto al que terminó condenado a prisión perpetua.
En un par de semanas se conocerán los fundamentos.
