Un siniestro con gas tóxico provocó la evacuación parcial del lujoso Hotel Four Seasons en el barrio de Retiro en Buenos Aires. La emergencia movilizó a numerosas unidades de emergencia este domingo, incluyendo ambulancias del Same y de empresas privadas, así como varias dotaciones de Bomberos.
El hecho comenzó cuando un escape de gas tóxico se produjo en el área de piletas del hotel, ubicado en Posadas 1086. El desagradable olor del gas se empezó a sentir en la zona, lo que llevó a una rápida intervención para proteger a los huéspedes y al personal del hotel.
Según fuentes oficiales, el gas tóxico se liberó debido a un error en el sistema de ventilación y almacenamiento de productos químicos en la sala de mantenimiento de las piletas. La mezcla de cloro y ácido clorhídrico, provocada por un mal funcionamiento de la máquina que maneja estos productos, generó una nube irritante que se dispersó por el hotel.
La evacuación, que fue decidida de manera preventiva, afectó a aproximadamente 60 personas que se encontraban en el lobby y el entrepiso del establecimiento. En total, 24 personas recibieron asistencia médica en el lugar, incluyendo un bombero que tuvo que ser atendido. Afortunadamente, no se reportaron derivaciones a centros asistenciales.
Para controlar la situación, se desplazaron cinco dotaciones de Bomberos de la Ciudad y nueve ambulancias del Same, junto con otras cuatro de empresas privadas de salud. Los equipos de emergencia realizaron un exhaustivo recorrido por las instalaciones del hotel, asegurándose de que el gas tóxico no afectara a otras áreas. También se encargaron de la desconexión y sellado de los contenedores involucrados en la fuga.
Gabriel Oliveri, empleado del hotel, explicó que se decidió llamar a ambulancias y bomberos como medida de seguridad tras la filtración detectada. “Tanto Bomberos como el personal del Same ya dieron el alta para habitar el lugar. Se recorrió el hotel completo, de arriba abajo, y actualmente cuenta con más de 300 personas”, indicó.
Testigos en el lugar informaron que el olor a gas, descrito como “picante y profundo”, comenzó a sentirse en la zona de las piletas, lo que llevó a la inmediata intervención para proteger a todos los presentes.
