La tarde del domingo, una jornada festiva organizada por el Mes de las Infancias en la plaza principal de San José del Rincón, un pueblo cercano a la ciudad de Santa Fe, terminó en un brutal enfrentamiento entre un grupo de mujeres, resultando en siete personas heridas. El incidente, que interrumpió la tranquilidad de un evento familiar, generó indignación entre los vecinos y requirió una importante intervención policial.
El altercado, cuyos motivos aún se desconocen, tomó gran magnitud en el centro de la plaza pública, ubicada sobre las calles San Martín y Constituyentes. Según información oficial, la situación escaló rápidamente en presencia de entre 200 y 300 personas, incluyendo numerosos menores, muchos de los cuales intentaron intervenir o grabar lo sucedido con sus teléfonos móviles. Testigos señalaron que durante la pelea, algunos niños fueron empujados al suelo en medio de la confusión, generando escenas de pánico y descontrol.
La intervención policial fue alertada por el responsable de Seguridad de la Municipalidad, quien reportó una “gresca de proporción”. Al llegar, los agentes constataron los hechos, observando cómo la concurrencia rodeaba la escena, algunos incluso alentando el altercado mientras otros intentaban separar a las involucradas. La disputa fue tan violenta que se utilizaron objetos contundentes, como cadenas de bicicleta.
El despliegue de efectivos del Comando Radioeléctrico y la Comisaría Distrito 14° incluyó al menos dos móviles y requirió refuerzos, ya que los uniformados actuantes se vieron superados en número. En el intento de disolver el enfrentamiento, dos agentes de policía resultaron agredidos físicamente, aunque sin lesiones de gravedad. La llegada de más efectivos permitió separar parcialmente a las personas involucradas.
El saldo inmediato del episodio fue de siete mujeres con lesiones leves, quienes recibieron asistencia médica en el lugar y no requirieron traslado hospitalario. Entre las lesionadas se encuentran adolescentes de 16 y 17 años, jóvenes de 20 y 22, y una mujer de 36 años. Todas ellas decidieron instar acciones penales contra sus agresoras, y tras ser evaluadas por Medicina Legal, las imputadas quedaron vinculadas a una causa por lesiones leves.
Todo el suceso quedó grabado por varios asistentes con sus teléfonos celulares. Fuentes de la Unidad Regional I indicaron que se abrió una investigación formal para determinar responsabilidades individuales y el origen del altercado. El proceso incluirá el análisis de las grabaciones, la identificación de los partícipes principales y el eventual testimonio de los agentes agredidos. Los organismos de seguridad adelantaron que continuarán trabajando conjuntamente para esclarecer los motivos y circunstancias que derivaron en este violento incidente. La presencia de menores y el uso de objetos contundentes elevaron la preocupación por la seguridad durante el evento.