El caso de Matías Jurado, el hombre que fue detenido en el barrio Alto Comedero de Jujuy bajo la sospecha de ser un asesino serial, sigue conmocionando a esa provincia. El detenido convivía con un sobrino, quien declaró frente a la policía y destapó el horror.
El fiscal Guillermo Beller dio detalles sobre la causa y contó fragmentos de las declaraciones del menor.
En una conferencia de prensa el fiscal reveló parte de la declaración de un sobrino de Jurado, cuyo testimonio fue clave para avanzar en la causa.

Según indicó el fiscal, el sobrino contó que le había advertido a un primo - otro sobrino del imputado - sobre las situaciones extrañas que ocurrían en la casa.
Este joven, de 18 años, al principio no le creyó pero decidió acompañarlo un viernes para comprobarlo. “Fui con él y vi justamente una escena, vi sangre por todas partes y Matías Jurado me dice: ”Vení, si querés ver una persona muerta. Vení y entrá“”, relató el testigo ante la fiscalía.
El fiscal Beller detalló: “Lo hizo entrar hasta la habitación y contó que vio tanta sangre que se asustó y salió corriendo”.
Una confesión que nadie quiso escuchar
La declaración de la tía del adolescente que vivía con el acusado fue una pieza clave también para la investigación.
El diario local Todo Jujuy asegura que la mujer declaró que notó al joven muy alterado durante una fiesta de cumpleaños y le preguntó que le pasaba.
El menor, de apenas 16 años, le respondió: “Lo que pasó es que anoche Matías mató a otro”. En ese momento, la familia no dimensionó la gravedad, pero la policía confirmó que días antes se había denunciado la desaparición de una persona en situación de calle, que todavía no fue encontrada y podría estar vinculada al caso.
En relación al adolescente, el fiscal Beller resaltó que se trata de un chico en situación de extrema vulnerabilidad que, sin madre ni padre presentes, quedó bajo el cuidado de su tío, hoy imputado por homicidio agravado.
Restos humanos: qué escondía la casa del asesino
Los investigadores encontraron huesos quemados, piel humana, manchas de sangre y signos de combustión en distintos sectores de la casa de Jurado.
En el patio trasero, hallaron tierra removida, una carretilla, una pala y elementos de jardinería que sugieren posibles entierros clandestinos.
Uno de los datos más impactantes de la investigación fue revelado este jueves por el fiscal Beller ante los medios: “Encontramos piel en los platos de comida de los perros del domicilio y también entendemos que Matías Jurado alimentaba a otros animales del barrio”.
“Esa piel que estaba tirada en los platos de comida de los perros eran partes de restos humanos: cartílagos, pelos y piel”, detalló el fiscal.
beller afirmó que, por la forma de operar del asesino, se han perdido pruebas importantes para la causa.
El asesino serial de Jujuy: su patrón de conducta
Matías Jurado fue imputado por el presunto homicidio agravado por ensañamiento de Jorge Omar Anachuri, de 68 años, quien había sido buscado desde el viernes 25 de julio.
Sin embargo, la investigación se extiende y el presunto asesino serial es ahora investigado por los supuestos crímenes de otros cuatro hombres en situación de calle que desaparecieron sin dejar rastro: Juan Carlos González (60), Juan José Ponce (51), Miguel Ángel Quispe (60) y Sergio Alejandro Sosa (25).

Todas las víctimas compartían un perfil similar: hombres mayores, en situación de vulnerabilidad y con contacto reciente con el acusado.
El patrón de conducta revelado por los peritos indica que Jurado presuntamente ofrecía a sus víctimas un empleo como maleteros en la terminal de ómnibus para ganarse su confianza.
Posteriormente, los invitaba a su vivienda con la excusa de compartir bebidas alcohólicas. Una vez en la casa, según la reconstrucción de los hechos, Jurado los asesinaba y luego descuartizaba los cuerpos para deshacerse de ellos de manera macabra.