Como parte de un avance en sus tareas de prevención, los miembros de la Guardia Urbana de Córdoba Capital comienzan a utilizar desde este jueves las pistolas que lanzan postas de gas pimienta, tal como las que poseen y usan los miembros de la Policía de Córdoba.
La Guardia Urbana de Córdoba es un cuerpo que depende de la Municipalidad y que realiza tareas de vigilancia y prevención en algunos barrios de la Capital. Sus móviles cuentan con efectivos preparados y policías a bordo. En algunos barrios ya patrullan también de noche.
En rigor de verdad, con la nueva ley de seguridad, cada municipio de la provincia puede contar con sus guardias urbanas para prevención.
La de Córdoba Capital se convirtió en la primera en acceder al uso de armas cortas no letales Byrna (lanzan postas de gas pimienta) y a los chalecos antibalas como sucede con la Policía.
Este cuerpo ya cuenta con 25 pistolas Byrna y 100 chalecos antibalas. Está previsto dotar a los efectivos con más de estos pertrechos.
No pueden usar armas de fuego como los policías.
Este jueves se realizó en la base operativa de la Guardia Urbana - en barrio Empalme, el intendente Daniel Passerini y el ministro de Seguridad, Juan Pablo Quinteros, oficiaron el acto de entrega de las primeras armas menos letales que se incorporan a las fuerzas locales de la Capital. También estuvo presente el titular de la Guarda Urbana de Córdoba, el excomisario Claudio Vignetta, quien destacó la portación de estos pertrechos para el trabajo cotidiano.
Desde la Municipalidad de Córdoba se informó que los efectivos de la Guardia Urbana equipados con los elementos de seguridad fueron capacitados a través de la diplomatura en Seguridad y Convivencia Ciudadana de la Universidad Nacional de Villa María y realizaron el curso de manipulación y portación de armas no tan letales dictada por efectivos de la dirección de Entrenamiento Policial de la Policía de Córdoba.
“Con el gobernador Martín Llaryora tomamos la decisión de llevar adelante el abordaje de la seguridad ciudadana desde los gobiernos locales. El trabajo articulado es una bandera que llevamos siempre en lo más alto, con el único objetivo de trabajar para la gente buscando soluciones”, dijo Passerini.
Por su parte, el ministro Quinteros resaltó a la Guardia Urbana de la Capital es la primera en la provincia en ponerse en funcionamiento. “Trabajar mancomunadamente nos permite hacer acciones muy concretas que benefician a la gente”, señaló.
“La Guardia Urbana ya empezó a caminar y este año vamos a redoblar esfuerzos para que empiece a correr, porque es lo que la sociedad nos está requiriendo”, puntualizó Vignetta.
Armas no letales
Las armas menos letales se utilizarán para reducir o disuadir a agresores en diversas situaciones, especialmente cuando se encuentran a una distancia menor a los siete metros. Junto a la adquisición de chalecos antibalas permitirá nuevos abordajes territoriales y funcionalidades para la fuerza local.
Son idénticas a las que porta la Policía de la Provincia, aunque en su versión de puño. De marca Byrna, tienen un característico color naranja y su forma es similar a las 9 milímetros.
Disparan un taco de goma macizo impulsado por gas comprimido de CO2 y pueden cargar otra munición que suelta gas pimienta al impactar.
En una primera instancia, durante los patrullajes de rutina los portadores de armas menos letales de la GUM se ubicarán en diferentes móviles.
De esta manera, ampliarán el área de cobertura con los elementos de seguridad para la disuasión del delito las 24 horas, los siete días de la semana, en sus 37 corredores diarios.
Efectivos capacitados
Los agentes de la Guardia Urbana en posesión de las armas menos letales se capacitaron con la diplomatura universitaria en Seguridad y Convivencia Ciudadana de la casa de altos estudios de Villa María, coordinada desde el Instituto de Planificación y Formación para la Seguridad y Convivencia.
Estos conocimientos les brindaron herramientas para trabajar con solvencia en la vía pública.
La instancia se complementa con el curso de manipulación y portación de armas no tan letales realizado con la Policía de Córdoba. Allí se impartieron módulos se legislación sobre el uso de la fuerza; los componentes del dispositivo de seguridad, su funcionamiento y uso previsto; aplicación práctica; y capacitación en escenarios reales.
